Un consuelo dorado; Cierre discreto de los Juegos Bolivarianos

Bolivia acabó quinto entre seis países en los Juegos Bolivarianos Sucre 2009, como hace varias ediciones. Pero respecto a la anterior, disputada en Colombia, dio un salto gracias a ocho disciplinas que ganaron oro.

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El equipo de raquetbol . Se quedó con las siete medallas de oro en disputa. Ayudó para que Bolivia aumente su cosecha de medallas de oro.



La Prensa

Ocho disciplinas —ciclismo, boxeo, tenis, tiro deportivo, tae kwon do, voleibol de playa, raquetbol y fútbol— pasarán a la historia por haber alcanzado la mayor cantidad de medallas de oro para Bolivia en unos Juegos Deportivos Bolivarianos tras caer el telón, ayer, de la decimosexta edición disputada en Sucre como sede central.

El consuelo de la representación nacional, que una vez más ocupó el penúltimo lugar —el quinto entre seis— de una cita bolivariana, es haber sumado más preseas doradas en una misma competición, superando a la de 1977 en La Paz, cuando fueron 15.

Bolivia acabó su tercera vez como anfitrión (la segunda fue en 1993) llegando a 20 títulos, lo que de alguna manera mitiga la pena de no haber podido hacer mucho en casa, donde fueron más los sinsabores como consecuencia de la escasa preparación de los deportistas.

El raquetbol, consiguiendo el 100 por ciento de las medallas de oro en juego, siete en total, volvió a ser la disciplina estrella del equipo Bolivia, como lo fue desde que es tomada en cuenta hace ya tres ediciones en los Juegos que reúnen a los países libertados por Simón Bolívar.

De no haber sido por Ricardo Monroy y compañía, la cosecha hubiera sido mínima y no se hubiera podido romper la marca.

Pero también el tenis jugó un importante papel, no tan perfecto como el raquet, pero casi, pues de las siete doradas en discusión, el equipo nacional ganó cinco y sólo dejó escapar dos.

Para ello fue valioso el aporte de Mauricio Estívariz. El valluno se colgó tres doradas, pues aparte de ganar el título individual, ayudó a que el tenis obtuviera dos más, confirmando que hoy por hoy es el mejor tenista del país.

La tercera disciplina que más aportó fue el tiro deportivo, aunque apenas con tres doradas, de ellas una sola individual a cargo del paceño Álvaro García (tiro rápido) y otras dos por equipos, ámbito en el que destacaron sobre todo los cruceños Rudolf Knijnenburg y Andrés Cossío, que se colgaron dos cada uno.

El fútbol celebró un título después de 16 años, pues su anterior corona la había conquistado, también de local, en los Juegos de Cochabamba y Santa Cruz del año 1993.

El técnico Óscar Villegas se despidió como seleccionador nacional de menores conduciendo a 18 chiquillos (Sub-17) a ganar el título que en un comienzo parecía lejano, aunque el panorama se recompuso en las dos últimas fechas y sobre todo con la victoria del miércoles contra Ecuador, que era el favorito.

Más meritorias resultan las victorias en disciplinas en las que parecía lejana la posibilidad de subir a lo más alto del podio. Por ejemplo, el ciclista Óscar Soliz luchó ante los fuertes representantes de Colombia, y pudo vencerlos en la apertura de los Juegos, ganando la contrarreloj individual.

Fue el potosino quien abrió la ruta hacia las 20 doradas, que continuó el boxeador tarijeño Luis Mancilla, de sólo 18 años de edad, al coronarse campeón en la categoría wélter mediano (69 kilogramos).

Fue toda una sorpresa, y causó una gran alegría, la campaña cumplida por la taekwondista valluna Kassandra Martínez, que se batió con verdaderos “monstruos” y salió a flote (53-57 kilogramos) sacando la cara por el país como la única en las disciplinas de contacto, pues en las otras —incluido el judo que se desarrolló en Lima, Perú— nuestros representantes por lo general fueron vapuleados.

Sin tener playas en el país, hace rato que el voleibol de playa boliviano asoma y da pelea en el contexto internacional, sobre todo gracias al trabajo que tiene su centro en Cochabamba, lugar de donde salieron las chicas doradas Amalia Calvo y Mayra Coll, que dieron la vuelta olímpica cada una portando la bandera nacional muy en alto.

En cuatro años, los Juegos volverán a celebrarse, aún no se sabe dónde, pero tal vez los que terminaron ayer hayan sido los últimos en los que en la mayoría de las disciplinas no hubo límite de edad, y pasarán a la historia por eso y porque Bolivia se bañó en oro más que nunca, todo un consuelo.

Diez de oro más que hace cuatro años

Hace cuatro años, en Armenia y Pereira, Bolivia sólo había ganado 10 medallas de oro. En comparación a esa cita, ahora las conquistadas son el doble. Quiere decir que el equipo nacional dio un pequeño salto, aunque cabe tomar en cuenta su condición de anfitrión actual y la cantidad —más de 400— de deportistas que intervinieron en Sucre 2009.

En aquella ocasión fueron sólo tres las disciplinas que subieron a lo más alto del podio: atletismo, tiro deportivo y raquetbol.

En 2005, tanto el ráquet como el tiro volvieron a ganar doradas, no así el atletismo, que hace cuatro años había tenido como gran figura a la marchista Geovana Irusta, quien en Sucre no pudo conquistar su cuarto cetro bolivariano y se tuvo que conformar con la medalla de plata.

También fue segunda este año la tiradora Carina García, que en Colombia se había apropiado de dos medallas de oro.

A diferencia de hace cuatro años, disciplinas como el ciclismo, el boxeo, el voleibol de playa, el tenis, el tae kwon do y el fútbol marcaron la pauta de que esta vez hubo superación.

La figura

Ricardo Monroy fue la gran figura boliviana en los Juegos Deportivos Bolivarianos. Se colgó en total cuatro medallas de oro. Una en la competición invididual, otra en el dobles masculino, la tercera en el torneo masculino por equipos y la cuarta en el último torneo desarrollado ayer, general por equipos.

La otra mirada

TRES DORADAS

Aparte de Ricardo Monroy, que se colgó cuatro medallas de oro, varios obtuvieron tres: los raquetbolistas Yazmine Sabja, Jorge Zambrana, Carola Loma y Jenny Daza; y el tenista Mauricio Doria Medina.

CON DOS

Cinco deportistas nuestros subieron dos veces a lo más alto del podio: María Paula Deheza y Federico Zeballos (tenis), Rudolf Knijnenburg y Andrés Cossío (tiro deportivo), además de Carlos Keller (raquetbol).

UNA DE ORO

El resto se colgó una medalla de oro: Óscar Soliz (ciclismo), Luis Mancilla (boxeo), Roberto Velasco, María Inés Deheza y Mauricio Doria Medina (tenis); Gabriel y Álvaro García (tiro deportivo), Kassandra Martínez (tae kwon do), Amalia Calvo y Mayra Coll (voleibol de playa), además de cada uno de los 18 integrantes del equipo de fútbol.

Cierre discreto de los Juegos Bolivarianos

Los Bolivarianos se cerraron ayer en el estadio Patria en una deslucida ceremonia a la que la misma afición no respondió.

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• POCA ASISTENCIA • La ceremonia de clausura se realizó con delegaciones reducidas y sin el entusiasmo de la inauguración.

La Razón

En una opacada ceremonia en la que desfilaron más voluntarios que deportistas, ayer por la noche se clausuró la XVI versión de los Juegos Bolivarianos Sucre 2009, en un acto que se realizó en el estadio Patria; asistieron autoridades departamentales y deportivas.

Ni las danzas folklóricas ni las exhibiciones de gimnasia lograron salvar el espectáculo con el que se puso el punto final al evento.

El cierre fue en familia y el show no emocionó a los cerca de 20.000 personas que se dieron cita en el Patria, teniendo en cuenta a las personas que salían y entraban a partir de las 16.00, horario en el que se inició la presentación de los grupos musicales y de danza.

La presentación central se inició a las 20.15 con el ingreso de la banda de la Prefectura de Chuquisaca, acto seguido comenzó el desfile de las seis delegaciones que fueron parte de los Juegos.

Con aproximadamente 20 integrantes, la delegación de Venezuela fue la primera en ingresar a la pista atlética del Patria, entre aplausos y silbidos de los asistentes sucrenses.

Quienes más ovaciones de los aficionados recogieron fueron los cerca de 25 deportistas colombianos, que en su paso mostraron una bandera celeste con la inscripción: “Gracias Sucre, Colombia se siente en casa”.

Luego ingresaron 20 representantes de Perú, una decena de Panamá, aproximadamente 35 de Bolivia y 40 de Ecuador.

Todos los deportistas bolivarianos fueron minoría ante el paso de los miembros del Comité Organizador y los voluntarios que colaboraron en los Juegos. Roxana Pomier, enviada a Sucre

Opiniones

“Damos gracias al Presidente”
Jorge España      || Odebo

La Organización Deportiva Bolivariana (Odebo) reconoce a las autoridades de Sucre que trabajaron para que los Juegos se desarrollen con normalidad. En especial debemos agradecer y damos gracias al presidente de la República, Evo Morales, por su apoyo para que se construyan escenarios deportivos para Sucre. También debemos agradecer la labor de las subsedes.

“Pedimos las disculpas del caso”
Aydée Nava      || Codebo

Hicimos todos los esfuerzos por corregir los errores que se cometieron en los Juegos Deportivos Bolivarianos. Pedimos disculpas a las delegaciones que tuvieron inconvenientes durante el desarrollo de las competiciones en Sucre. La medalla de oro, la más importante es para la gente, el pueblo de Sucre que nos apoyó y colaboró en la organización del evento.