Juancito Pinto, ¡sálvame!

evo juancito Ante la caída de la aprobación gubernamental en las encuestas, no hay como un buen show mediático que utilice la imagen de los niños para tratar de repuntar un poco. Esa parece ser la estrategia adoptada por el gobierno de Evo Morales, días después de conocerse un sondeo de Ipsos donde el presidente registra una baja en su respaldo popular, quedando en minoría con un 49%. La evaluación global del gobierno es aún más negativa, con ministros que por lo general apenas pasan del 20% de aprobación y cuyas cifras de rechazo superan el 50%. Como ya sucedió en ocasión de anteriores bajadas, el Ejecutivo optó por hacer la entrega del bono Juancito Pinto en medio de una gran campaña comunicacional, que incluye spots y actos mediáticos en diversos puntos del país, donde se trata de remarcar la idea del “Evo Benefactor” de los niños. En Trinidad, por ejemplo, le correspondió a Álvaro García Linera encabezar el acto de apertura de la entrega, seguramente con la intención de contrarrestar la caída de la aprobación del vicepresidente al 41%, con un ascenso del rechazo al 52%. El expediente de los bonos para repuntar caídas ya ha probado su efectividad en otros momentos, aunque su impacto es sólo temporal, de aproximadamente 30 días. Después de eso, la inflación, la escasez, la conflictividad y la prepotencia seguirán ahondando el proceso de desgaste…

La funcionalidad no paga

Aunque hizo todo para ganarse la gracia del poder, abriéndole las puertas de Santa Cruz al gobierno central y participando en actos conjuntos con el presidente y el vice, Rubén Costas no logró evitar que el proceso judicial en su contra siga adelante. Lo dijimos en ocasiones anteriores y lo repetimos ahora: ser funcionales con el proyecto hegemónico del evismo no brinda garantías de protección, sino que le allana el camino a los autoritarios para concentrar más poder, que tarde o temprano será usado contra los mismos funcionales. A cambiar de estrategias entonces, y de liderazgos…

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