Luis Miguel reconquista Bolivia

Un concierto espectacular brindó ayer Luis Miguel. Durante casi dos horas el intérprete hizo un recorrido por los éxitos de su carrera. El público cruceño lo ovacionó.

luismi Entre un grito ensordecedor de sus incondicionales apareció ‘El Sol’ a las 22:45 sobre un escenario esplendoroso para iluminar una noche de jazz, tango, pop, bolero y romanticismo.
Una banda exquisita de 12 músicos respaldó a Luis Miguel, que inició el idilio con su público con Te propongo esta noche, el cortejo era celebrado por su banda que bailaba con soltura.

Bastó la interpretación de Suave para que el coqueteo estuviera a flor de piel. “Un saludo desde aquí a toda Bolivia”, fueron las primeras palabras del artista que regresó al país después de dos décadas. “Es un privilegio volver a Bolivia después de tantos años”, añadió y el público respondió con tímidas carcajadas, pues era evidente que se recordaba la sonada polémica que se generó luego de una desafortunada frase de ‘Luismi’ en aquella oportunidad.



De ahí en más el romance fue intenso, aunque el artista tuvo algunas desatenciones con las más de 12.000 personas que coreaban sus canciones al exigir a sus técnicos que revisaran el sonido de sus retornos.
Con Tres palabras, la entrega fue total, ya que el público tomó asiento e hizo una pausa a la euforia y se concentró en seducirse a la envidiable voz de Luis Miguel. El bolero La Barca y Come fly with me, que interpretó junto a una grabación de Frank Sinatra que apareció en la pantalla gigante del escenario, hicieron que la pasión se incendiara.  
Con O tú o ninguna, No me puedes dejar así, Palabra de honor, La incondicional y Un hombre busca a una mujer, el intérprete consumó la reconquista con sus fans bolivianas.
Luis Miguel agradeció el cariño entregando poleras y pelotas a sus seguidoras más cercanas y regaló más temas en un popurrí  de sus primeros éxitos. El romance tuvo dos bises y la euforia desatada antes del final delató la satisfacción de sus fans, que terminaron exhaustas.

  En detalle 

Reiterado. Quedó demostrado que las sillas están demás en algunos sectores, por ejemplo en gold, donde la gente volvió a subirse a ellas, estorbando a toda las personas del área de cancha.
Penumbras. Al final del show las luces del estadio no se encendieron nunca y el público tuvo que retirarse  en la oscuridad, tropezándose con todos los objetos que quedaron regados en el piso.
Control. La prensa estuvo marcada de cerca al ingreso del estadio.

Fuente: El Deber