La ONU denuncia probables crímenes contra la humanidad en Siria

Navy-Pillay El régimen sirio bombardeó de nuevo este lunes la ciudad rebelde de Homs, ignorando el llamamiento de la Liga Árabe al envío de una fuerza de paz común con la ONU, que habla de probables crímenes contra la humanidad en el país.

Las fuerzas sirias "probablemente cometieron crímenes contra la humanidad" al reprimir desde marzo de 2011 la rebelión contra el régimen sirio, causando unos 6.000 muertos según activistas, afirmó Naciones Unidas.

La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, dijo este lunes ante la Asamblea General de Naciones Unidas que "la naturaleza y la escala de los abusos cometidos por las fuerzas sirias indican que probablemente se cometieron crímenes contra la humanidad desde marzo de 2011".



Por su parte, la secretaria de Estado estadounidense Hillary Clinton deploró el lunes la intensificación de la violencia por parte del régimen sirio, que incluye el uso de artillería y tanques.

"Es lamentable que el régimen haya intensificado la violencia en ciudades de todo el país, incluyendo el uso de artillería y disparos desde tanques contra civiles inocentes", dijo Clinton en Washington.

Clinton dijo en una conferencia de prensa junto al ministro de Relaciones Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, que Estados Unidos trabajaría con Ankara para resolver los problemas humanitarios en Siria. Agregó que se comprometió a permitir la entrada de suministros de emergencia a Siria.

El régimen sirio bombardeó de nuevo este lunes la ciudad rebelde de Homs, ignorando el llamamiento de la Liga Árabe al envío de una fuerza de paz común con la ONU, que habla de probables crímenes contra la humanidad en el país.

Haciendo oídos sordos a las voces que le piden poner fin a la represión, el régimen del presidente Bashar al Asad siguió este lunes bombardeando Homs (centro), afectado además por una crisis humanitaria ya que según algunos militantes está faltando el pan.

La Cruz Roja siria dijo que distribuyó ayuda médica y alimentos a miles de personas en la "capital de la revolución", donde según un recuento de la ONU más de 300 personas murieron desde el 4 de febrero en "ataques indiscriminados contra zonas civiles".

Pero la violencia, que este lunes se cobró 11 nuevos muertos, civiles en su mayoría, no parece arredrar a los opositores.

"La revolución continúa mientras haya un bebé vivo entre nosotros", podía leerse en una pancarta en una manifestación en la provincia de Deraa (sur), cuna del movimiento opositor, según un video difundido por activistas.

"Bashar, todavía tenemos cuentas que saldar, tu último día ha llegado", gritaban decenas de personas en la provincia de Idleb (noroeste).

Ante esta crisis, la Liga Árabe, que ya había tratado de aprobar en la ONU una resolución de condena a la represión (propuesta bloqueada por Rusia y China), decidió pedir al Consejo de Seguridad la formación de una fuerza conjunta arabo-onusiana.

El jefe del Consejo Nacional Sirio (CNS, principal coalición de la oposición), Burhan Ghaliun, dijo a la red de televisión Al Jazeera que veía en estas decisiones "los primeros pasos" hacia la caída del régimen.

Sin embargo, el gobierno sirio respondió que "estas decisiones y similares no impedirán al gobierno asumir sus responsabilidades en la protección de sus ciudadanos y el restablecimiento de la seguridad y la estabilidad", de acuerdo con un funcionario mencionado por la agencia oficial Sana.

"Los árabes no han aportado nada nuevo, más allá de su llamado a la ocupación de Siria por tropas extranjeras", afirmó un artículo del diario Al Watan, próximo del gobierno.

La idea de una misión de paz no suscita sin embargo unanimidad.

Si bien la Unión Europea apoya la iniciativa, Londres dijo que quiere "hablar de ello de forma urgente" con la Liga Árabe y añadió que los occidentales no debían participar en ella.

Francia se mostró muy escéptica. Rusia, aliada de Moscú, dijo que estudia la propuesta, aunque advirtió que previamente será necesario un alto el fuego. China de momento no se ha pronunciado.

AFP