Una de las 2 bolivianas muertas en Once estaba embarazada

Tres víctimas bolivianas en choque del tren. Historias del drama del accidente ferroviario en Buenos Aires. Nayda Tatiana Lesano y Micaela Cabrera viajaban en el tren que se estrelló en la estación de Once.

imageAsí quedó la máquina al chocar contra el andén el miércoles por la mañana en Once. Telam.

Cali Machicado / Buenos Aires, especial para Página Siete



Nayda Tatiana Lesano Alandia, de 33 años, y Micaela Cabrera Machicado, de 27 años, son las dos ciudadanas bolivianas fallecidas en el accidente ferroviario del miércoles en la estación de Once, en Buenos Aires.

Ambas fueron buscadas y lloradas por sus familiares en medio de la incertidumbre que rodea al siniestro 24 horas después. Ellas son parte de esta tragedia que selló el destino de las 50 personas muertas y 703 heridas, de las cuales sólo 46 permanecen el hospitales. Mientras, los familiares peregrinan por los hospitales de Capital Federal en busca de desaparecidos. 

En esa búsqueda, Marcelo Edwin Ojeda Ortiz, el esposo de Nayda Tatiana Lesano, y su cuñado Juan Carlos Durand daban un dato adicional para ayudar a ubicarla: estaba embarazada de seis meses.

Ni bien encontraban a un doctor de emergencias, ambos trataban de averiguar si en la lista de heridos figuraba Nayda. Pero no tuvieron suerte.

Gustavo Méndez buscó hasta la extenuación a su esposa Micaela Cabrera Machicado, pero tampoco le dieron referencia alguna. Finalmente, con profundo dolor, la reconoció por las fotos que publicó la morgue judicial de Buenos Aires.

Fue el cuñado de Nayda, funcionaria del consultado de Bolivia en Buenos Aires, quien se dirigió a los medios para informar sobre el triste deceso de su familiar; casi sostenía al esposo de la funcionaria consular fallecida. En cambio, el esposo de Micaela Cabrera compareció en las radios, pero pidió que le dieran unos minutos para llorar y tomar fuerza a fin de comunicar la noticia a la familia de su esposa, que reside en Bolivia.

Arminda Lesano, hermana de Nayda Tatiana, cuenta que la fallecida era una madre amorosa de tres niñas y que esperaba con alegría a su cuarto bebé. “Era trabajadora y emprendedora”, dice Arminda. Tatiana, como la llamaban sus amigos, era de Sucre y hace ocho años que vivía en Argentina. Migró con su título de abogada para poder ejercer y tenía casa propia en Hurlingham, Buenos Aires. 

Micaela Cabrera vivía hace diez años en Argentina. Ese día no iba a trabajar, sino a averiguar los requisitos que necesitaba para inscribirse en un colegio secundario, pues deseaba retomar sus estudios para ayudar a su hija de seis años y su pequeño de tres. “Micaela era de La Paz, fue la luz de mi vida, amaba a nuestros hijos”, dijo su marido Gustavo Méndez a Página Siete.

El siniestro, al día

Maquinista. Antonio Córdoba, el maquinista de 28 años que conducía el tren que chocó en una estación de Buenos Aires, dio negativo en una prueba de alcoholemia.

Molestia. La Policía tuvo que acordonar la estación de Once por temor a protestas de los familiares de los pasajeros del tren siniestrado.

Responsabilidad. La empresa de transporte TBA mencionó un posible error humano en el accidente.

Renovación. La prensa pidió renovar los trenes.

Tres víctimas bolivianas en choque del tren

Se afina el recuento de las bajas del accidente ferroviario.

La Razón / Alfredo Grieco / La Paz

Nayda Tatiana Lezano Alanda, abogada de 33 años, y Micaela Cabrera Machicado, de 27 años, son las dos bolivianas fallecidas. A ellas se suma Juan Daniel Cruz Aguilar, de 15.

El fallo de los frenos del tren del Ferrocarril General Sarmiento, que llegaba a la ciudad capital desde el oeste de la provincia de Buenos Aires, y el fallo de los parachoques hidráulicos en la estación porteña de Once, selló el destino de las 50 personas fallecidas y de los 703 heridos, de los cuales sólo 46 permanecían anoche hospitalizados.

Micaela Cabrera Machicado vivía en Argentina desde hace diez años.

Su historia era como la de toda mujer migrante. Pero a diferencia de la abogada Lezano, Micaela ese día no iba a trabajar. Iba al Consulado boliviano a preguntar por requisitos para inscribirse en secundaria.

Con la anuencia de su esposo, Gustavo Méndez, al que conoció en Liniers (zona de negocios y restaurantes bolivianos), quería retomar sus estudios, ahora que su hijo tiene seis años y su hija, tres. Todavía no está decidido si la enterrarán en Argentina o en Bolivia.

Morir a bordo de un vagón en Argentina a los 15 años

Juan Daniel Cruz Aguilar, que murió en el accidente ferroviario de la estación Once (o Plaza Miserere), era  argentino de nacimiento, pero hijo de bolivianos. Falleció a los 15 años.

Fue su padre quien confirmó la noticia con funcionarios del Consulado General de Bolivia en Buenos Aires. Nació en Argentina, pero la Constitución boliviana reconoce que toda persona que nace fuera del país y que tiene padre o madre bolivianos, es también considerado como ciudadano del país. Por lo tanto, este joven sería la tercera víctima boliviana en este trágico hecho.