Gobierno versus Veja, capítulo III

Hay en América del Sur un gobierno en cuya gestión se expanden los cultivos de coca-para-cocaína en un 25% (ONU), encabezado por el presidente de los sindicatos responsables de esa producción. Un gobierno que no ha logrado o no ha querido combatir al narcotráfico que desde su territorio inunda las favelas del Brasil.Un gobierno que cobija en su seno y en el partido oficialista a personajes cuestionados de tener vínculos con esa actividad ilícita.Un gobierno que prefiere, cuando alguien denuncia estas realidades, perseguir a los denunciantes.Un gobierno que ha elegido estar en guerra con una revista de prestigio, en vez de estar en lucha contra las narco-mafias.Es la guerra del gobierno de Evo Morales contra Veja, en la cual el régimen cocalero lleva las de perder. Por la simple razón de que su credibilidad es muy cercana a cero.En ese contexto, la publicación brasileña acaba de divulgar un nuevo artículo en la saga de “La República de la Cocaína”, el tercero de una serie que promete continuar por un buen tiempo. Nota donde se señala que Morales no ha dicho “ni una palabra sobre averiguar los hechos descritos en el informe de la unidad de inteligencia de la policía boliviana”. Y donde ironiza sobre las primeras declaraciones del flamante representante diplomático de la administración evista en Brasilia, Jerjes Justiniano (“Muy sutil, embajador”, responde la revista a la bravata sobre “sentarle la mano”).Pero Veja no es, en absoluto, la única fuente internacional que advierte sobre la narcotización del Estado boliviano.El periodista norteamericano Douglas Farah, investigador experto en el campo del terrorismo y el tráfico de drogas, dice sin pelos en la lengua que “La gente que rodea a Evo Morales claramente está involucrada en temas de narcotráfico. Es muy difícil de creer que él mismo no supiera y hay documentos que yo he revisado que vienen de la inteligencia de la policía boliviana, por amigos de Evo preguntando por qué él no hace algo, diciendo que la corrupción ha llegado a nivel tan alto y cómo es que el hermano Evo no reacciona. Yo creo que es obvio que él sí sabe por lo menos y tolera el narcotráfico a muy altos niveles de su propio gobierno”.Renunciar a la presidencia de los sindicatos cocaleros y alejar a Quintana del gabinete es lo mínimo que Morales debería -y no piensa hacer- en estas circunstancias…[email protected]