Reservas bolivianas golpeadas por crisis internacional

Pese a estar alejada de las turbulencias financieras internacionales, Bolivia está sintiendo de «rebote» la crisis por la desaceleración en Brasil, Argentina y China, sus principales socios comerciales.Así lo indicó el Banco Central, que reveló una desaceleración del crecimiento de las reservas internacionales en torno de 50% en el primer semestre del año en comparación con el mismo lapso del año pasado.El presidente de esa entidad, Marcelo Zabalaga, dijo el viernes que las reservas se incrementaron en 485,7 millones de dólares entre enero y junio hasta llegar a los 12.700 millones de dólares en comparación con los 999,8 millones de incremento en igual período de 2011.»Las fluctuaciones de las monedas, del oro y de los precios internacionales de los hidrocarburos hacen que nuestro crecimiento (en reservas) sea más lento», dijo.Este es el aumento más bajo en las reservas en los dos últimos años, según el privado Instituto Boliviano de Comercio Exterior. Brasil y Argentina, las mayores economías de la región, son los principales mercados del gas natural boliviano y están sufriendo los embates de la crisis internacional, mientras que China compra minerales, segundo rubro de exportaciones de Bolivia y cuyos precios están a la baja.Las reservas representan 52% del Producto Interno Bruto (PIB), uno de los más altos de la región, según el Banco Central.El PIB de Bolivia tuvo un crecimiento espectacular de 9.500 millones de dólares en 2005 a poco más de 18.000 millones a 2011 por los precios de las materias primas que a su vez permitieron que las exportaciones crezcan de 2.867 millones de dólares en 2005 a 8.288 millones el año pasado, según el Instituto Boliviano de Comercio Exterior.El presidente Evo Morales, que asumió el poder en 2006, exhibe con frecuencia esos datos como su mayor éxito y su manejo de la macroeconomía ha merecido elogios de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe y el Fondo Monetario Internacional, entre otros organismos.El efecto precio, sin embargo, ha hecho a la economía boliviana más dependiente de las materias primas a pesar del propósito del gobierno de diversificar las exportaciones e industrializarse, según expertos.El otro efecto «rebote» de la crisis internacional se está mostrando en una caída de las remesas de los bolivianos que trabajan en el exterior. El primer trimestre de este año disminuyeron 4,6% de 250 millones de dólares a 238,6 millones respecto de similar período del año precedente, según el Banco Central.Argentina y España son los principales destinos laborales de los bolivianos.A principios de año el ministro de Economía Luis Arce vaticinó que la crisis internacional no afectaría a la economía boliviana gracias a la política antiinflacionaria, la revalorización de la moneda local, una política fiscal austera y fomento de la demanda interna.El relativo aislamiento económico de Bolivia le permite una cierta resistencia a las crisis internacionales pero también la desconecta de las grandes olas de crecimiento y de las principales corrientes del pensamiento mundial, según la Fundación Milenio, dedicada a estudios socioeconómicos.Terra – Lima