Bolivia. Reos extranjeros revelan rutas de tráfico de drogas y ganancias

Al menos 400 de los 620 extranjeros que están en las cárceles de Bolivia están por tráfico de drogas. Ingresan al país desde Perú para luego trasladarse a Argentina y llegar hasta Europa. la recompensa varía de acuerdo a la ruta.

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Opinión, Cochabamba



Varios extranjeros, que están recluidos en los penales cochabambinos, fueron capturados trasladando droga en el retén de Locotal, carretera a Santa Cruz. ARCHIVO

Llevados por la facilidad de ganar dinero, por presión y algunos supuestamente por necesidad, más de 400 extranjeros recluidos en penales bolivianos dejaron su patria y cayeron en manos de redes de narcotraficantes para traficar con droga.

Su oficio, como muchos bolivianos detenidos por la temida Ley de Régimen de la Coca y Sustancias Controladas -más conocida como la 1008- era hacer de “mulas” (transportar droga).

Hasta hace menos de cinco años, la cifra de reos extranjeros por la 1008 era inferior a la actual, aseguran algunos presos de los penales cochabambinos, quienes hoy deben convivir con extranjeros de distintas nacionalidades recluidos por el tráfico de droga, además de otros que están detenidos por robo agravado, estafa, entre otros delitos.

Según datos del director nacional de Régimen Penitenciario, Ramiro Llanos, el número de extranjeros recluidos en los penales del país alcanza a 620, de los cuales más del 70 por ciento está por el tráfico de drogas.

En el caso de Cochabamba, la cifra de extranjeros en los reclusorios llega a 80, de los cuales más del 60 por ciento está por la 1008, informa por su lado el director regional de Régimen Penitenciario, Dennis Mejía.

Algunos reos, que prefieren no ser identificados, explican que hasta hace un tiempo tenían como compañeros solo a peruanos, colombianos y brasileños que, en su mayoría, estaban por robo y otros delitos, y muy pocos por droga. Sin embargo, hoy habitan en los penales españoles, noruegos, israelitas y rusos que fueron hallados presuntamente llevando droga o por lavado de dinero.

DROGAS

Jóvenes y adultos de distintas nacionalidades han sido capturados por traficar no uno sino hasta más de diez kilos de droga, camuflados en distintos objetos, que han sorprendido a los policías de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn).

Y es que los narcotraficantes han implementado distintas e ingeniosas formas para intentar burlar el control policial boliviano que hay en retenes camineros y en los aeropuertos.

La tarea de la mayoría de estos reos era llevar droga desde el Perú hasta los Estados Unidos o Europa. Para esta labor necesariamente debían pasar por Bolivia, país en el que fueron capturados de forma in fraganti, dicen policías de la Felcn.

Un grueso de los acusados fueron capturados en Santa Cruz, mientras que otros en La Paz, seguido de Cochabamba y Tarija.

Y es que la ruta de denominadas “ mulas” extranjeras, por lo general, es ingresar desde Perú hasta Bolivia vía La Paz, para luego pasar por Cochabamba y dirigirse a Santa Cruz. Tras ese recorrido se trasladan a Tarija para finalmente salir hacia la Argentina, país en el que muchos entregan la “mercadería” ilícita a otras “mulas”, que tienen como labor llevar la droga vía aérea hasta algún país europeo, que por lo general es Italia o España.

ARREPENTIDOS

Lejos de su patria y solo, está recluido Néstor (nombre ficticio), un español que asegura que por necesidad y a la vez por presión de unos amigos (uno de República Dominicana y otro boliviano) aceptó llevar tres kilos de droga, carga que debía transportar desde Perú hasta España. Sin embargo, en su recorrido fue interceptado en la tranca de Locotal, carretera nueva a Santa Cruz.

“Sé lo que he hecho, pero también me dijeron que fui denunciado para que me capturen. Fui otra víctima más del narcotráfico”, dice mientras sus ojos se llenan de lágrimas y con la voz entrecortada comenta que desde que está recluido “mi vida ya no es vida, he perdido las esperanzas porque aquí estoy solo y abandonado”.

Agrega que está arrepentido y desesperado, porque no cuenta con dinero que le ayude a sobrellevar los varios problemas de salud que lo aquejan.

Carlos (nombre ficticio) también es otro reo peruano que fue capturado por llevar droga desde su país hasta Santa Cruz.

“Fui capturado en la tranca de Locotal. Me animé a entrar al negocio porque necesitaba dinero y la recompensa que me ofrecían no era nada despreciable, más aún cuando uno necesita”, dice al responder que por el traslado de dos kilos de cocaína recibiría 3 mil dólares.

Y es que muchos extranjeros y también bolivianos aceptan ser “mulas” por jugosas recompensas, mismas que varían de acuerdo a la distancia que trasladan la “mercadería”.

Si una persona sea hombre o mujer lleva droga desde Perú hasta Cochabamba o Santa Cruz puede ganar entre 2 mil y 3 mil dólares, mientras que si se arriesga a llevar hasta Argentina puede recibir 5 mil dólares y a Europa más de 10 mil euros.