Pese al control, contrabandistas sacan combustibles por 15 puntos de Bolivia

El bajo precio de los carburantes en el mercado interno ‘motiva’ el delito. Una vez fuera del país, el valor de la gasolina y el diésel es hasta cuatro veces superior al original. Todas las fronteras son consideradas zonas rojas

imageIncautación. Bidones de gasolina y diésel decomisados en diversos operativos realizados por las FFAA y la ANH en fronteras del país.

La Razón / La Paz



Contrabandistas de carburantes “se las ingenian” constantemente para sacar del país combustibles a bajo precio, pese a que la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y las Fuerzas Armadas (FFAA) intensificaron operativos en 15 puntos fronterizos por donde cometen el ilícito.

“Se controlan todas las fronteras, pero todo esfuerzo es insuficiente debido a la situación de los combustibles en el país (su bajo precio por subvención estatal). Pongamos el control que pongamos, siempre habrá alguien que siga incurriendo en el delito”, dice Marco Antonio Romay Taborga, director de Control al Mercado Interno de la ANH, expresión con la que coincide Juan José Contreras, jefe del centro de Monitoreo de la misma institución pública.

De hecho, en al menos 200 operativos, la ANH, junto al Comando Conjunto de las FFAA, se incautó de 500 mil litros de combustible (diésel y gasolina) entre enero y el 1 de octubre de este año. En 2010 se secuestraron 200 mil litros. “El contrabando bajó porque la Ley 100 impone sanciones más duras y mucha gente ya tiene cuidado”, destaca Romay.

No obstante, los contrabandistas se dan formas “innovadoras” para sacar los combustibles; así habilitan buzones específicos para transportar esta carga en los buses, e incluso hay mujeres que cargan aguayos repletos de bolsas plásticas con algún carburante. En el oriente  optaron por trasladar la mercadería por vía pluvial.

La principal causa para esta actividad ilegal es el precio de los combustibles en el mercado interno. El litro de diésel en Bolivia vale Bs 3,72 y la gasolina Bs 3,74. “Cualquiera de los dos productos en el exterior cuesta el equivalente a Bs 12 el litro”, dice Contreras. Aunque conoce de reportes en sentido de que, en ciertos casos, el valor es cuatro veces superior al original. Según datos del Instituto Nacional de Estadística, en 2011 Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos importó 961.752 toneladas de carburantes por valor de $us 979,5 millones (La Razón 03.03.12). 

El Estado pierde porque adquiere el combustible a precio internacional, pero en el mercado interno lo comercializa a menor costo por la política de subvención. Para 2012, el Presupuesto General del Estado destinó $us 755 millones con ese fin.

“No se puede cuantificar cuánto realmente pierde el país, es difícil conocer con exactitud la cantidad de combustible que sale ilícitamente”, precisa Contreras. 

Las vías de salida a las que recurren los contrabandistas están en las fronteras. Hacia Perú estos productos se expenden en ferias y hacia el sur (norte de Argentina y el noreste de Brasil), el tráfico se realiza por rutas alternas. “Nuestras fronteras son muy extensas y todas son zonas rojas”, fue enfático en señalar Contreras.

En el caso del departamento de La Paz, explica que el combustible sale hacia el Perú por seis rutas: Desaguadero, Copacabana, Guaqui, Hito 4, Puerto Acosta y Suches. En Puerto Acosta (provincia Camacho frontera con el Perú) existen tres ferias comerciales y en Suches (provincia Franz Tamayo) hay una más donde la venta de combustibles es una práctica.

También recibieron denuncias en sentido de que desde la comunidad de Huila Khala (provincia Camacho) se transportan carburantes a la feria de Huancasaya en Perú, ubicada a minutos de viaje, pues está al frente de la localidad y no hay control.

En los departamentos de Oruro y Potosí, el combustible es sacado por los contrabandistas hacia Chile por cuatro lugares: Pisiga, Tambo Quemado, Charaña y Uyuni. Hacia el sur, por Tarija, el tráfico se efectúa por dos fronteras: Yacuiba (Pocitos boliviano y argentino) y Bermejo.

Otra región donde se comete el ilícito es el norte del territorio, hacia Brasil, básicamente por los departamentos de Pando, Beni y Santa Cruz. Hay tres regiones de mayor afluencia: Puerto Suárez, Guayaramerín (Guayará) y San Matías, según el informe de las autoridades de la ANH.

Sistemas de control

Entre los métodos de control que aplica la ANH está la instalación de GPS (sistema satelital de posicionamiento) para hacer seguimiento a cisternas; además de cámaras de vigilancia y sensores de volumen en estaciones de servicio.