Exdiplomáticos advierten que cada vez más se daña la imagen de Bolivia en Brasil

Funcionarios del Gobierno boliviano realizaron tres inspecciones a naves oficiales de Brasil. “Este es un caso muy grave”, dijo Gonzalo Montenegro, exembajador de Bolivia en Brasil;  “ El hecho le pone al Gobierno en una situación incómoda. Afecta a su imagen”, afirmó el excanciller boliviano Armando Loaiza.

Exdiplomáticos dicen que últimas revelaciones dañan más la imagen de Bolivia en Brasil

imageEl ministro brasileño, Celso Amorim, reveló tres casos de requisas a naves de su país. “Fue una torpeza” responde el canciller boliviano David Choquehuanca y espera dejar cerrado el tema. Foto archivo El Diario.

La Paz, 18 de julio (Oxígeno).- “Este es un caso muy grave”. Estas fueron las primeras palabras de Gonzalo Montenegro, exembajador de Bolivia en Brasil, cuando Oxígeno le pidió su opinión sobre las tres inspecciones a naves oficiales de Brasil realizadas por parte del Gobierno boliviano.



Inicialmente el Gobierno boliviano consideró la noticia “una broma” y el canciller David Choquehuanca pidió a los periodistas que se “ocupen de cosas más serias”. Cuando Choquehuanca hizo estas afirmaciones, Brasil aún no había confirmado la inspección de las naves brasileñas.

La noticia de la inspección a naves oficiales por parte de Bolivia surge en un momento en que el bloqueo aéreo al presidente Evo Morales causó revuelo internacional. Al repudio de los gobiernos ante lo ocurrido al presidente Morales se sumó también el de Brasil.

“Si se confirma que Bolivia inspeccionó naves brasileras, ¿cuánto afecta eso al Gobierno a nivel internacional?”, se le preguntó al excanciller boliviano Armando Loaiza. “Mucho”, fue su respuesta. “De confirmarse esa situación, el hecho le pone al Gobierno en una situación incómoda. Afecta a su imagen”.

Tres requisas

“A mí, como exdiplomático, me preocupa el tratamiento que el Gobierno de Bolivia le está dando a Brasil… Este caso es muy grave, porque se nota que ha habido una suerte de hostigamiento al requisar sus naves. Yo pensé que se trataba de una sola requisa, no de tres”, dijo Montenegro.

Y es que las relaciones de los últimos años entre los gobiernos de Bolivia y Brasil están siendo marcadas por una sumatoria de actos, especialmente visto desde Brasil. El caso Róger Pinto, las quejas de brasileños que han invertido en la agricultura en la frontera, la detención de brasileños en Oruro por la muerte de un adolescente (en este momento cinco aún están detenidos), el cada vez más intenso tráfico de drogas de Bolivia a Brasil, el caso de los pandinos refugiados por el caso Porvenir, son algunos hechos que han tensionado las relaciones entre ambos países.

Y la requisa a naves brasileñas está entre las otras razones que causaron molestias en el gigante sudamericano. Pero este caso se lo manejó casi en secreto por casi dos años. ¿Por qué? Ni en Brasil ni en Bolivia hay explicaciones a ese silencio.

“Estamos haciendo cuestión de Estado con el hecho de que hayan querido requisar el avión del presidente Evo Morales en Europa. Pero, lo malo es que no vimos la película completa: que Bolivia también había estado haciendo lo mismo”, dice Montenegro.

¿Por qué la Presidenta de Brasil y Bolivia no realizaron hasta ahora una reunión bilateral? Para los entrevistados, los casos citados tienen mucho que ver en que ambos mandatarios no se hayan reunido todavía.

Tras la posición del Ministro de Defensa de Brasil, el titular de Gobierno de Bolivia, Carlos Romero, dijo que no hubo orden alguna para requisar las aeronaves brasileñas y que, de todas maneras, se abrirá un proceso de investigación. Más tarde, el Canciller boliviano admitió una requisa en 2011 y que fue "una torpeza". En la noche, el Ministro de Defensa boliviano admitió finalmente que fueron tres requisas.

¿Qué le queda a Bolivia?

Tanto Montenegro como Loaiza coinciden en que las relaciones entre Bolivia y Brasil no están pasando por un buen momento, y que Bolivia no debe perder de vista que Brasil es su socio mayor en lo comercial y su vecino más importante.

“Para Bolivia la relación con Brasil es estratégica. Es el mayor comprado del gas. Existen otros intercambios importantes y otros acuerdos fundamentales, como la lucha contra el narcotráfico”, dice Loaiza.

“La obra de integración económica más importante en Sudamérica es el gasoducto Bolivia-Brasil. En su momento fue la obra más grande en América Latina. Debemos seguir enriqueciendo las relaciones… Bolivia debe privilegiar su relación con Brasil. Lo ideológico no debe distorsionar un buen relacionamiento”, afirma Montenegro.

El hecho de que el Canciller boliviano haya considerado la noticia surgida en Brasil como una “broma”, es “despreciar las noticias”, dice Montenegro. Ahora, lo que le queda al Gobierno –recomienda el exembajador– es mostrar un actitud de “transparencia, sinceridad, y mostrarnos las cartas de lo que ha ocurrido” en esas tres requisas.

Para este diplomático, ese es el único camino que va a permitir limar asperezas entre ambos gobiernos, que tienen muchos intereses en común.

“Precisamente para resolver este tipo de discrepancias están las relaciones diplomáticas”, dice, por su parte, Loiza.