Después de matar a su esposa a tiros el jueves por la mañana, Derek Medina le tomó una foto al cuerpo ensangrentado y la colgó en su página de Facebook, confesando ante todo el mundo lo que había hecho. Luego se entregó a las autoridades de South Miami, publica el Nuevo Herald.
“Enfrento la prisión o pena de muerte por matar a mi esposa”, escribió Medina, de 31 años, en su página. “Me van a ver en las noticias”.
Todo empezó alrededor de las 11:30, en el townhouse ubicado en el 5555 SW 67 Avenue, que Medina compartía con su esposa, Jennifer C. Alfonso. Medina dijo a las autoridades y a todos quienes visitaban su página de Facebook que había discutido con Alfonso, de 26 años. Además, aseguró que él había sido la víctima.
“Mi esposa me estaba golpeando y ya no voy aguantar ese abuso entonces hice lo que hice”, escribió Medina, que no tiene antecedentes delictivos. “Espero que me comprendan”.
Medina fue arrestado la noche del jueves, bajo el cargo de asesinato en primer grado. Los detectives de la Unidad de Homicidios aún no han determinado el motivo, dijo el investigador Javier Báez, vocero del Departamento de Policía del Condado Miami-Dade.
Medina admitió ante los detectives que durante un pleito verbal, él sacó una pistola y que entonces Alfonso le sacó un cuchillo. Medina le quitó el cuchillo de las manos, lo devolvió a una gaveta, y le disparó varias veces, de acuerdo con fuentes policiales.
Entonces, Medina fue a la casa de una tía cercana y confesó haber matado a su esposa, de acuerdo con un amigo de la familia. La tía le llamó al padre de Medina, quien acompañó a su hijo a la sede de la policía de South Miami para entregarse.
Una amiga de Alfonso dijo que Medina era un esposo celoso y autoritario. “Ella llegaba con moretones”, dijo Amada Cooper, quien supervisaba a Alfonso en un restaurante Denny’s en el oeste del Condado.
La pareja se había casado originalmente en enero del 2010 tras un breve romance y tuvieron una relación tumultuosa. Los registros judiciales indican que se divorciaron en febrero del 2012, pero volvieron a casar apenas tres meses después en Coral Gables. Cooper dijo que la pareja se peleaba frecuentemente pero que siempre terminaban juntos otra vez.
Fuente: El Deber