Los SS quieren cercar Santa Cruz

Alejandro Brown*

ALEBROWN Como ya nos tienen acostumbrados, los sectores evistas afilan sus lanzas para imponer mediante la violencia su doctrina pseudoindigenista. Los SS (sectores sociales) del MAS en Santa Cruz amenazaron con cercar la capital oriental en caso que la Asamblea Legislativa Departamental no apruebe el Estatuto Autonómico con los cambios dictados por el Gobierno Central.

Un retroceso total a la lucha regional cruceña y el último bastión de la victoria cívica, legalmente obtenida y avalada por el 86% de la población mediante el referéndum por los estatutos del 4 de mayo del 2008.



Otro beligerante atropello a lo constitucionalmente instituido y una violación más a la Constitución Política del Estado, CPE, aprobada por el mismo Evo Morales Ayma y sus aliados.

La comisión especial de adecuación estatutaria de la Asamblea Departamental Legislativa de Santa Cruz viene sufriendo agresiones que vulneran sus derechos humanos en las audiencias públicas en las provincias, donde grupos afines al Movimiento Al Socialismo (MAS) rechazan el evento y tratan de imponer sus propios estatutos, totalmente centralistas. Lo sucedido en Portachuelo, Montero y Warnes es una muestra más de cómo el gobierno de Evo Morales, bajo la ‘ley del mazo’, impone su totalitarismo sin dejar que el pueblo decida, opine o simplemente adecue sus estatutos regionales, que en teoría deberían ser autonómicos.

“Nos vamos a levantar a nivel departamental. A Santa Cruz vamos a hacer un cerco porque ellos quieren aprobar su estatuto autonómico, no vamos a permitir su aprobación sin que vengan a las bases del MAS”, afirmó en Warnes, Paola Sánchez, representante del sector de los interculturales del MAS de Santa Cruz, flanqueada por el alcalde impuesto Mario Cronenbold y su grupo de choque, el mismo que tumbó al legítimo burgomaestre warneño, Nils Carmona.

La presión de los llamados colonizadores, que en el 2008 cercaron Santa Cruz a punta de lanzas, machetes y armas de fuego, a la cabeza de Fidel Surco, ha obligado a los asambleístas de oposición a que en las audiencias públicas se limiten a informar y escuchar, pero no decidir ni aprobar nada, siendo que éstas deberían ser para adecuar las normas subregionales a los estatutos y a la misma CPE.

Desde Palacio Quemado, el centralismo ya disparó sus dardos y amenazó que las elecciones para gobernador del 2015 correrían riesgo si no se adecua el estatuto de los masistas, en palabras de la ministra de Autonomías, Claudia Peña.

Negar la elección por voto popular del gobernador y asambleístas departamentales refleja esa mentalidad centralista y autoritaria que tiene el Movimiento al Socialismo. La elección no depende de la adecuación porque está ya definida en la Constitución Política del Estado, a no ser que se niegue la vigencia de la Constitución.

Lo que está tratando de hacer la Asamblea es recibir observaciones y propuestas de la población y de las organizaciones legalmente establecidas para una verdadera adecuación, sobre la base que se luchó y aprobó en las urnas.

El Movimiento Al Socialismo solo está desinformando a la ciudadanía con las acciones de violencia que ha provocado en las provincias.

Las audiencias deben continuar conforme con el programa planificado por la comisión especial, ya que al final la adecuación del Estatuto a la Constitución Política del Estado (CPE) se debatirá públicamente entre los 28 asambleístas que conforman el órgano deliberante departamental. Es a este fin que no quiere llegar el MAS, por ello ahora tiene movilizado a sus sectores de choque para volver a cercar Santa Cruz, arrebatar el logro cruceño de haber votado por sus estatutos e imponer su autonomía indígena que centra el poder en la cabeza de Evo Morales.

¡Dios nos salve! porque con lo fraccionada que está la oposición y sin líderes regionales visibles que se atrevan a poner el pecho como sucedió en el 2008 y 2009, lo más probable es que el régimen evista imponga su totalitarismo. Esperemos que el espíritu guerrero del cruceño sobresalga, que el león en letargo despierte, y se defienda el honor de las 477.872 personas que votaron por el sí a los estatutos autonómicos.

*Perseguido político