Bolivia recuerda hoy la masacre de Todos Santos con llamado de atención de la ONU

Informe. El ente internacional dice que hay temas pendientes desde las dictaduras.

Bolivia recuerda la masacre de 1979 con llamado de atención de la ONU

image En 1979, el golpe de Estado del coronel Alberto Natusch Busch y su efímero gobierno de 16 días dejaron un saldo de cientos de muertos desaparecidos.

Imágenes del violento Golpe de Estado de 1979. Fotos: Román Cordero-Archivo.



La Razón / La Paz

Bolivia recuerda hoy la masacre de Todos Santos, que se produjo hace 34 años por efecto del golpe de Estado que comandó el coronel Alberto Natush Busch, bajo el signo de una llamada de atención que emitió ayer, desde Ginebra, el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.

El organismo internacional consideró ayer que Bolivia tiene temas pendientes por resolver sobre los crímenes perpetrados durante los periodos de dictadura (1964-1982) en materia de reparación de daños a los afectados, luego de examinar el cumplimiento del país del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, ratificado por el Legislativo con rango de ley.

El vicepresidente Álvaro García Linera cree que es posible una investigación profunda sobre los daños ocasionados en las dictaduras militares, pero descartó un resarcimiento mayor, a favor de las víctimas, que aquel que se estableció con la Ley 2640 de 2004, y que benefició a 6.000 personas.

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Protestas. Miles tomaron las calles para exigir volver a la democracia.

Informe. El jurista Fabián Salvioli, del Comité, expresó que una de las principales preocupaciones, en el caso de Bolivia, tiene que ver con el “insuficiente tratamiento de la reparación por violaciones de los derechos humanos cometidos durante el periodo de las dictaduras militares”. Explicó —según reseñó EFE— que “no existe suficiente reparación (de daños), ni en el plano económico ni en términos de memoria, verdad y justicia para quienes fueron víctimas de violaciones a los derechos humanos entre 1964 y 1982”.

El golpe de Estado del 1 noviembre de 1979, que está incluido en el periodo que analizó la instancia internacional desde Ginebra, se produjo con la masacre de Todos Santos, que provocó la muerte de 100 civiles y 40 desaparecidos, de acuerdo con el recuento de la Fundación Boliviana Contra la Impunidad. Ayer, García Linera dijo que unas 300 personas perdieron la vida durante los 16 días que duró la resistencia ciudadana y sindical. Hasta la fecha no se establecieron responsabilidades por este cruento golpe militar, que fue respaldado por una facción del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) que dirigió Guillermo Bedregal.

El Segundo Mandatario afirmó que no sólo hubo crímenes durante las dictaduras, sino también en democracia. Recordó “los asesinatos a sangre fría” de cuatro jóvenes integrantes del CNPZ, en Sopocachi (1990), que sin embargo habían secuestrado al empresario Jorge Lonsdale. “En dictadura y democracia hemos cumplido lo que dice la ley. Hubo una ley del año 2000-2001 para reparar a las víctimas de las dictaduras y nosotros hemos elaborado una ley y cumplido lo que dice. Está claro que no siempre la gente se siente satisfecha con ello, hay más personas que se sienten involucradas y quieren recibir su remuneración”, afirmó García Linera en una rueda de prensa en el Palacio Legislativo.

La acción impune

La dictadura de Natusch Busch duró los 16 días de la resistencia ciudadana. No hay una cifra exacta de muertos. El caso está en la impunidad.

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Los militares dejaron Palacio Quemado ante la falta de apoyo. Víctor Paz, líder del MNR, nunca respaldó la acción. Lidia Gueiler jura de la mano de Wálter Guevara.

El golpe apoyado por el MNR y el MNRI

Aproximadamente a las 02.30 del 1 de noviembre de 1979, el coronel Alberto Natusch Busch comenzó a escribir uno de los episodios más cruentos de la historia boliviana. Con apoyo de miembros de las Fuerzas Armadas y de dirigentes del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) y del Movimiento Nacionalista Revolucionario de Izquierda (MNRI), derrocó al gobierno de Wálter Guevara Arce.

El alegato fue el supuesto afán prorroguista de éste en su interinato de un año, que surgió tras el empantanamiento en el Congreso para elegir al presidente entre los candidatos más votados en 1979: Hernán Siles Zuazo (UDP) y Víctor Paz Estenssoro (MNR). El golpe se realizó horas después del final de la Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos en La Paz, donde Bolivia logró un triunfo de su diplomacia porque todos los cancilleres —excepto el de Chile— aceptaron que la demanda marítima se discuta multilateralmente.

No obstante, a las pocas horas, el coronel vería cómo su mandato era desconocido en las calles, en el Parlamento, en el país. Dar un paso al costado le tomó 16 días, tras centenares de desaparecidos, muertos y heridos, en lo que se conoce como la masacre de Todos Santos.