El evismo y la nueva “Guerra Fría”

EVOPUTINA diferencia de un grupo de repúblicas de la región integradas en la Alianza del Pacífico, que eligieron el pragmatismo y la desideologización para sus relaciones internacionales, y que están despegando en materia de crecimiento merced a una activa política de libre comercio con los países desarrollados, los regímenes neopopulistas de la ALBA han optado por una política externa confrontacional y de alineamiento con lo que podríamos denominar el “club de las dictaduras”.En este nada selecto club se contaba hasta hace poco la tiranía libia del extinto Gaddafi, y se cuentan aún desde la sangrienta dictadura siria hasta la teocracia iraní, pasando por el capitalismo autoritario chino y el gobierno oligárquico ruso.Precisamente, con este último la administración de Evo Morales se ha empeñado en estrechar lazos en los últimos tiempos, en una ecuación que incluye la penetración rusa en el área de los hidrocarburos bolivianos y el armamentismo militar.En el segundo rubro, el régimen evista planea adquirir misiles tierra-aire que, según informes de prensa, podrían “trastocar el equilibrio de defensa andino”.Más allá de esto, lo cierto es que el gobierno cocalero se inserta de alguna manera en el ajedrez de la nueva “Guerra Fría” impulsada por el ex jefe de la KGB y hoy presidente ruso, Vladimir Putin, quien procura revivir algo del antiguo rol desempeñado por la Unión Soviética.Mientras el evismo se empecina en las “relaciones peligrosas”, los países de la región que mencionábamos al inicio de la nota avanzan en el sentido del progreso. De ahí que peruanos y colombianos hayan logrado la exención de visa para sus ciudadanos en la entrada a Europa, beneficio que el gobierno de Morales no ha conseguido para los bolivianos…[email protected]