FireFox OS, una perspectiva desde el tercer mundo

Firefox OS no está llamando demasiado la atención en los mercados más populares, pero quizás sea una opción muy viable en las economías emergentes, donde el poder adquisitivo está mucho más limitado.

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Cuando hace poco más de un año Mozilla anunciaba al mundo que se aventuraría a crear un nuevo sistema operativo de código abierto para smartphones económicos, rápidamente la opinión pública tuvo que enfrentar sentimientos encontrados. Y es que muchas plataformas han intentado hacerse un hueco en este difícil mercado, y para aquél momento incluso Microsoft lo estaba teniendo bastante difícil creándose un nombre. Por tanto, costaba bastante imaginar que FireFox OS pudiera tener algún éxito.



Pocas cosas no han cambiado, y luego de su lanzamiento y puesta en contacto con el mundo, los primeros smartphones basados en FireFox OS han dejado la sensación de que no ofrecen nada realmente nuevo, salvo por un precio sensiblemente menor al de lo que ya hay en el mercado.

El más duro inconveniente que ha tenido que afrontar la nueva plataforma, es tener que ser comparado con los sistemas operativos que actualmente ya se han ganado un lugar en el mercado. Y es que, no hay nada en lo que FireFox OS destaque por encima de sus rivales, siendo que además se queda muy corto en términos de rendimiento, lo que inevitablemente llevará a los más tecnologías a descartar de inmediato la plataforma en búsqueda de algo más avanzado.

Un sistema operativo para usuarios medios

El primero problema con FireFox OS es su nombre. Es una plataforma de software libre, y está desarrollada por la fundación que desarrolla FireFox, navegador que desde siempre ha sido el favorito del los geeks. Por tal, de igual modo que sucedió con Android cuando daba los primeros pasos en este mundo, pronto se le marcó como sistema operativo para geeks. El hecho es que FireFox OS es precisamente lo contrario a eso.

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La alternativa de Mozilla no tiene el hardware mas puntero del momento, y las especificaciones de todos los terminales son bastantes modestas comparadas con la competencia. En lo que a aplicaciones respecta, aun están muy, pero muy cortos. Tampoco hay una inmensa comunidad de desarrollo dispuesta a crear alternativas de software, mods, roms y forks. Por tanto, se le mire por donde se le mire, FireFox OS, de momento, no es un sistema operativo para usuarios avanzados.

En cambio, todo el que haya puesto sus manos en un terminal con FireFox OS pronto habrá notado que es bastante intuitivo. No cuesta mucho acostumbrarse a su uso, y aunque, como ya hemos mencionado, no está saturado de aplicaciones para todo, sí que tiene las aplicaciones fundamentales que el usuario medio necesita para sobrevivir, incluyendo alternativas para usar Whatsapp, como Loqui IM.

Y claro, a todas luces el principal atractivo de FireFox OS es el bajo costo de los terminales. Por tanto, a criterio personal, bien podría tratarse de la solución perfecta para aquellos que buscan mantener el uso de las principales redes sociales sin tener que pagar por un terminal que se sale de sus posibilidades, y aunque en el primer mundo lo segundo no es una limitante tan grande, otra historia canta en los países en vías de desarrollo.

Mercados emergentes: la gran solución

No solo de la gama alta viven los fabricantes. Eso es algo muy bien sabido por empresas como Motorola y Nokia, que recientemente han logrado levantar cara gracias a opciones con precios mucho más razonables. Sin embargo, en algunas locaciones, 200 dólares sigue estando bastante por encima de lo que pueden ganar en un mes de trabajo duro.

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Ese es el caso de algunos países de América Latina, por ejemplo. No sé cómo puede estar funcionando la estrategia de los operadores con FireFox OS en el resto del mundo, pero, particularmente en Venezuela, el teléfono ha sido un éxito rotundo. La desmedida inflación que hemos visto durante el último año ha hecho que hacerse con smartphones de gama alta sea un privilegio que no cualquiera puede permitirse, y en Movistar se vende el Alcatel One Touch Fire por 10 veces menos de lo que cuesta un Moto G libre.

El Estado también ensambla smartphones Android, que están doblemente subvencionados, tanto por la ensamblador como por el operador que los comercializa, también propiedad de la nación. Pese a esto, los smartphones Android de Vtelca, que es el nombre de la empresa que produce los dispositivos, son más costosos que un terminal FireFox OS de Movistar, quienes suelen tener precios bastante más altos.

El hecho es que para un usuario medio, que no esté buscando lo último de lo último, por lo menos en los países en vías de desarrollo, FireFox OS bien podría ser la mejor opción posible.

Aun hay mucho que la alianza de empresas encargadas de dar soporte a la plataforma deben hacer si quieren mantenerse competitivos. En el futuro, el sistema operativo de Mozilla bien podría dar el salto a la gama alta, y competir en los mismos términos con Windows Phone y Android a nivel global. Por lo pronto, seguramente no será una opción viable en las economías del primer mundo, y tendrán que conformarse con crecer en la medida que operadores y fabricantes le brinden apoyo en los mercados emergentes.

Fuente: gizmologia.com