Cristina: “A los que se están equivocando los vamos a llamar”

Por Lucía Salinas

De bombachas y faja pampa. Cristina dejó definitivamente el luto y ayer se mostró con look campestre./EFE



Cristina Fernández de Kirchner ayer volvió a hablar desde un escenario. Esta vez para festejar el aniversario del Lago Argentino, en El Calafate. Pero, aunque dijo que quería estar alegre, no pudo con su enojo. Sin dejar de lado la coyuntura inflacionaria y sin nombrar a nadie, la jefa de Estado dirigió un mensaje de advertencia: “A los que se están equivocando los vamos a llamar para que se dejen de equivocar, porque cuando se equivocan le hacen mucho mal a los argentinos”.

Y, después, señaló: “Los vamos a llamar para dialogar porque le hacen mucho daño a la Argentina, para que ellos sigan creciendo y tener más, que en el fondo es lo que les importa, tener más. Nos tiene que ir bien a todos”, agregó.

“Por parte de aquellos que han tenido la suerte y el apoyo de las políticas del crecimiento que han tenido durante los últimos diez años, que les ha permitido tener mucho más de lo que tenían hace 10 años, no les pido generosidad, simplemente inteligencia para que sigan creciendo y seguir teniendo más, que en el fondo es lo que les importa”, reiteró la Presidenta.

Con 16 grados y una gran presencia turística por la Fiesta del Lago, la Presidenta –que arribó a la Villa Turística el viernes cerca del mediodía– encabezó el 137° aniversario del bautismo del Lago Argentino. Se quedará hasta el jueves. Hoy festejará el cumpleaños de su hijo mayor, Máximo (38), y el suyo el miércoles, cuando cumplirá 61. Acompañada por la militancia kirchnerista, el acto protocolar se inició a las 12.30 cuando se izó el pabellón Nacional y que otorgó una foto que no se daba hace tiempo: Cristina y el gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, juntos después de casi dos años.

La militancia kirchnerista acompañó a la Presidenta y también los intendentes del PJ y los que están enfrentados con Peralta participaron del acto. Antes del mediodía la ministro de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, el titular de la Sedronar, Juan Carlos Molina y el ministro de Turismo Enrique Meyer, estuvieron en la municipalidad junto al intendente local, Javier Belloni, y el vicegobernador Fernando Cotillo. Minutos después llegó el gobernador Peralta para sorpresa de muchos. Julio de Vido ingresó minutos más tarde y saludó “cordialmente” al gobernador santacruceño que, en reiteradas oportunidad había acusado al ministro de ser un “interventor virtual” de Santa Cruz. “Fue un ambiente cordial pero tenso”, sostuvo un funcionario municipal.

Sin usar la cadena nacional, como en los tres actos anteriores, Cristina habló durante media hora. Se mostró distendida, vestida de blanco con una faja tejida en telar. La Presidenta “jugó de local”, y al comenzar a hablar dijo: “Me siento en casa”.

Con ironía tuvo un pasaje para los medios de comunicación, cuando señaló: “Se cayó un árbol y nos dio un lugar privilegiado para el escenario, pero no me encanta que se haya caído porque ya me veo los titulares de mañana”.

Frente las críticas, la Presidenta anunció la aprobación del reglamento para la zona franca en Río Gallegos e inauguró obras de interconexión de El Calafate al sistema nacional eléctrico. Además, firmó un convenio para la pavimentación de 30 cuadras de la ciudad.

Fuente: clarin.com