Sobreviviente cuenta cómo huyó del derrumbe y salvó a su nieto

Carlos Ayala permaneció con su nieto detrás de una roca en Morochata. Se encontraron tres cuerpos de 14 desaparecidos. Se suspendió el rescate en Chullpa K’asa Chico. Continúa el riesgo en la zona. Afectados velan a sus fallecidos.

image Los comunarios de Morochata velan los restos de sus seres queridos. Opinión.

Opinión y Página Siete, BOLIVIA



En  cuestión de segundos la vida de Carlos Ayala cambió para siempre. Su esposa y sus tres hijas fueron enterradas por la mazamorra y las piedras del deslizamiento de un cerro en la comunidad de Chullpa K’asa Chico,  en el municipio de Morochata (Cochabamba), donde continúa el peligro.

La noche del sábado, cuando ocurrió el derrumbe, Carlos y su nieto se salvaron de milagro. Una  roca enorme cerca de su casa les sirvió de protección y evitó que fueran enterrados, y se convirtió en su refugio en medio de la oscuridad.  Hasta ayer no podía borrar de su mente la mirada de desesperación de su esposa antes de morir, ni de sus hijas, de 18, 15 y 12 años,  quienes también intentaron escapar de la mazamorra pero no lo lograron.

"Al escuchar ese ruido fuerte he salido con mi nieto de la casa y hemos empezado a correr. Por mi detrás estaba mi esposa. Mis hijas se han quedado en la casa. Ahí les ha agarrado la tierra”, relata Ayala con llanto.

En la oscuridad sólo escuchaba los gemidos de su nieto. Ambos se abrazaron y lloraron sobre lo que ahora es la tumba de 11 desaparecidos y donde se encontraban al menos 10 casas, cultivos y ganado.

La noche se hacía larga hasta que, desde las montañas, unas luces alumbraron el lugar de la tragedia. Los efectivos de rescate los socorrieron y llamó a sus familiares para informarles de lo sucedido; cuando los primeros rayos de sol asomaban rascó la tierra para buscar a su mujer y a sus hijas, con la esperanza de hallarlas con vida.

  Los efectivos se sumaron a su esfuerzo y encontraron a su esposa, después a su suegro (que vivía en otra casa). También a un niño de nueve años.

Ayala quedó  prácticamente solo, pero asegura que tiene una razón para vivir: su nieto. Sólo solicita encontrar los cuerpos de sus hijas para darles  sepultura y empezar otra vez.

"Solo he quedado, ¿con quién voy a vivir? Tenía mi tierra donde sembraba, ahora no tengo nada. Me han prestado incluso ropa y abarcas”, se lamenta.

Otras tres personas que se salvaron fueron Teófila Muriel y sus dos hijos. Ellos estaban en Chullpa K’asa Grande, una comunidad ubicada al frente de la primera. Trabajaba en el centro de salud y su turno concluía a las 20:00, media hora antes del derrumbe, en el que perdió a su suegro, sus cuñados  e hijos.

Suspenden la búsqueda

Antes del mediodía de ayer las autoridades suspendieron la búsqueda de los cuerpos porque en el lugar se produjeron dos nuevos deslizamientos.

La responsable de la Secretaría de los Derechos de la Madre Tierra de la Gobernación de Cochabamba, Cinthya Vargas,  dijo anoche que todavía se detectaban movimientos de tierra.

"Aquí estuvieron el presidente Evo Morales, el viceministro de Defensa y varios técnicos, todos coincidieron en que es muy peligroso hacer el trabajo en este momento. Las lluvias continúan como en todo el país, entonces hay que esperar un poco y cuando haya seguridad vamos a ingresar”, informó Vargas.

La autoridad departamental explicó que de los 14 desaparecidos, tres fueron encontrados (aunque había rumores de un cuarto cuerpo). Al menos cuatro familias fueron aplastadas, varias viviendas quedaron afectadas, por lo que se trasladó a 30 familias a una unidad educativa de la comunidad vecina.

  En el sobrevuelo que el presidente Evo Morales llevó a cabo pudo notar que algunos  comunarios continuaban con la búsqueda de sus familiares, por lo que aconsejó no arriesgar sus vidas. Los perros del lugar también rasgaban la tierra con sus patas. Allí, además de 11 personas, están sepultadas cuatro vacas, 100 ovejas y otros animales domésticos como cerdos, patos y gallinas.

El viceministro de Defensa Civil, Óscar Cabrera, indicó que aunque se cuenta con maquinaria no es recomendable su ingreso debido a que puede ocasionar un nuevo deslizamiento. Dijo además que para la mañana de hoy se puede confirmar el rescate de un cuarto cuerpo. 

El vicepresidente Álvaro García Linera dijo que en la región continúa lloviendo, por lo que hay amenazas de más derrumbes.  Aseveró que ante todo se debe dar prioridad a la vida.

Evo ofrece a comunarios tierras fiscales en el oriente

El presidente del Estado, Evo Morales, ofreció tierras fiscales en el oriente boliviano a los comunarios que resultaron damnificados por el deslizamiento ocurrido en la comunidad de Chullpa K’asa, departamento de Cochabamba.

"Son varios los afectados, hemos pedido, y ojalá decidan, irse al oriente boliviano. El Gobierno está dispuesto a garantizar  20, 30, hasta 50 hectáreas de tierras fiscales que se tiene en algunos departamentos del oriente, eso dependerá de las familias”, dijo el Primer Mandatario.

Morales llegó a la región la madrugada de ayer luego de abandonar la ciudad de Oruro, donde se encontraba para celebrar la efeméride de ese departamento. El vicepresidente Álvaro García Linera pidió a los orureños  comprensión por la partida.

En Cochabamba, el Presidente lamentó las pérdidas humanas  a causa de las precipitaciones pluviales y consideró que en la mayoría de los casos éstas suceden porque la gente quería salvar sus pertenencias.

Después de hacer una evaluación general de los efectos de las lluvias, según la Agencia de Noticias Fides (ANF), anunció que su Gobierno resarcirá los daños en materia agrícola y de vivienda en las zonas afectadas. Tuvo problemas para partir en su helicóptero debido al mal tiempo.

Lista de víctimas

Nómina  Los fallecidos son: Rosendo Muriel Mamani, de 75 años; Paulina Muriel Mamani (36) y Ruth Ayala Rodríguez (8). Los desaparecidos: Modesta Rodríguez (49), Nelly Ayala (13), Clara Ayala  (8), Silvia Álvarez Muriel (51), Lucía Quiroz (63), Víctor Riveroy (65), Florentina Guarachi (48), Ana Coca Guarachi (9), Belina Coca Guarachi (6) José  Meneses (3) e Ismael Álvarez.