Norah Soruco de Salvatierra*
Con un ambiente preelectoral signado de apatía o resignación ciudadana, excepto las militancias partidarias, las encuestas dan cuenta que la candidatura de Evo Morales a un tercer periodo presidencial tiene perspectivas de victoria, extremo que repiten sus voceros en todo auditorio disponible.
Lo notable es que tales expresiones de éxito presente y victoria anunciada no se afincan en los atributos del candidato, en los logros alcanzados en sus gestiones o en la perspectiva de un proyecto nacional que requiera de más tiempo de poder, sino en un renovado ataque a los adversarios potenciales candidatos, sean de izquierda, de centro o de derecha, que provocan un ambiente generalizado de incertidumbre, retraimiento o desesperanza.
Nos preguntamos, si hay tanta seguridad en la victoria, si el apoyo al proceso actual es tan grande, ¿a qué se le teme tanto? ¿A qué tanto acoso a los opositores? Más bien parecen síntomas de una realidad adversa que no conocemos.
Si el propósito es lograr más apoyo que el ya obtenido, llegar a espacios territoriales que no les fueron favorables o a segmentos de población excluidos como los sectores medios, ¿no sería mejor formular una perspectiva de reconciliación nacional? El sueño de todo presidente es pasar a la historia como un Estadista, capaz de alcanzar metas de envergadura histórica para su país y es un rasgo central de quien es capaz de administrar un Estado en su diversidad, de generar ideología alrededor de su proyecto pero en un clima democrático pleno, mucho más si se es y se preside un gobierno fuerte.
Después de las drásticas medidas aplicadas para asentar el esquema gubernamental, sería más constructivo abrir un espacio que permita sacar al país de la tradicional lógica amigo/enemigo, en una acción nacional con el mismo norte: la pacificación, la institucionalización, la modernización, industrialización y tecnificación para el progreso de Bolivia, antes que sea demasiado tarde. Puede parecer ingenuo, pero de esto es de lo que está sediento el pueblo.
*Ex Presidenta de la H. Cámara de Diputados