Oruro. 16 dominicanos eran trasladados a Chile. Hay cuatro extranjeros detenidos.
Policía desbarata una red de trata de personas
Operativos. Dos de los acusados de ser tratantes, trasladados a celdas judiciales en la ciudad de Oruro. Juan Mejía.
La Razón / Oruro
En un operativo conjunto, la Policía, Interpol y el Ministerio Público desbarataron parte de una red internacional de trata y tráfico de personas, luego de que interceptaran un bus de la empresa Trans Sabaya en el que trasladaban 16 dominicanos con destino a Chile. Hay cuatro extranjeros detenidos.
La acción llevada a cabo por la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de Oruro se desarrolló la madrugada del viernes, cuando fueron aprehendidos cuatro individuos, dos dominicanos y dos peruanos, acusados de ser los supuestos tratantes de personas.
El ministro de Gobierno, Jorge Pérez, informó que las víctimas encontradas salieron de la República Dominicana hacia Ecuador, Perú y Bolivia, y a través del Desaguadero a Oruro, con el objetivo de llegar a Santiago de Chile, donde debían ser empleadas en algún trabajo.
El fiscal del departamento de Oruro, Orlando Riveros, no descartó que los “tratantes” sean parte de una red que involucra a delincuentes de República Dominicana, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Chile. “Ésa es la información preliminar que tenemos, entonces se entenderá que la gente no llega fácilmente ni por medios normales hasta Oruro”.
“El propósito no lo sabemos todavía, podría ser para trabajos de prostitución, trabajos inhumanos, una serie de modalidades y posibilidades. El Ministerio Público va a imputar a las cuatro personas por el delito de tráfico, aunque las víctimas no quieren hablar”, señaló.
Según detalles del operativo, se pudo dar con el ilícito porque los efectivos del Plan Chachapuma sospecharon del viaje irregular de los extranjeros e inmediatamente convocaron a la Fiscalía. El caso es el primero de los últimos años en Oruro, principal centro de transporte internacional hacia Chile.
Pagaron por viajar
Santiago
Según la Fiscalía, las 16 víctimas pagaron $us 2.000 por persona para ser llevadas hasta Santiago de Chile. Los extranjeros evitaron admitir su condición de víctimas, lo que puede dificultar la posibilidad de ser beneficiarios de una visa humanitaria.