«He entrevistado a varios testigos directos», relata el historiador argentino Abel Basti. «A esto se le han sumado ahora documentos desclasificados del FBI, de la CIA, de los servicios de inteligencia que hablan de un Hitler vivo en la Patagonia argentina con un seguimiento de esto. En un dossier de la CIA hay una foto de Hitler en el exilio con otro nazi, de apellido Citroën».
Según datos oficiales, Argentina albergó al menos a 180 criminales militares alemanes. Parte de ellos cambiaron de identidad para camuflarse en la vida cotidiana de las ciudades. Erich Priebke, Dinko Sakic y Adolf Eichmann son algunos de los nazis que se ocultaron en estas tierras. Si bien en los documentos no se pudo comprobar la llegada de Hitler a Argentina, hay estudios locales que aseveran su presencia.
«Encontramos un conjunto de construcciones cuya explicación es muy difícil», dice el arquitecto y arqueólogo Daniel Schavelzon. «La hipótesis que manejamos hasta hoy —que sigue siendo una hipótesis y necesitamos más de un año para comprobarlo y cerrar el tema— está relacionada con la mitad de la década de los 1940 y con algunos aspectos del nazismo».
A su vez, el historiador Osvaldo Bayer recuerda que en la zona había colonias alemanas que practicaban el nazismo, escuelas alemanas y clubes alemanes que seguían la misma línea política.
Fuente: ActualidadRT