Compromiso por los incautos

Maggy TalaveraMAGGYCuando decidí sobre qué iba a escribir, dos opciones de títulos disputaron con el que finalmente encabeza este artículo: La dupla perfecta y Juntos serán dinamita. Al final opté por Compromiso por los incautos, porque alude directamente al Compromiso por los vecinos suscrito entre los concejales electos Angélica Sosa y Johnny Fernández, cada uno jefe de la fuerza política que los eligió para encabezar sus respectivas candidaturas: Santa Cruz Para Todos (SPT) y Unidad Cívica Solidaridad (UCS), respectivamente.Hay razones para dudar que sea un compromiso para “beneficiar a todos los vecinos del municipio, atendiendo y solucionando de forma oportuna sus necesidades y demandas”, como reza la última frase del primero de los tres puntos del documento. Ese enunciado en realidad solo sirve de adorno para disfrazar el verdadero objetivo, fijado en los tres puntos: “Asegurar la gobernabilidad” del gobierno local a lo largo de los cinco años que dura el mandato. Algo que SPT no logró en las urnas y que le ha obligado a sellar un pacto con su hasta hace poco acérrimo crítico, como fue UCS en la campaña electoral. Los motivos para desconfiar de la verdadera intención de estos jefes políticos han sido dados por ellos mismos y por sus organizaciones políticas, ambas con ejercicio de poder en la comuna. Un ejercicio marcado por serios cuestionamientos en el manejo de los recursos y bienes ediles, más allá de las diferencias presupuestarias millonarias vistas entre una y otra gestión, así como por la definición y la calidad de obras ejecutadas. Esto sin contar las prácticas autoritarias del ejecutivo, el ninguneo del legislativo y el uso abusivo de estrategias de cooptación de gremios a través de la prebenda y el chantaje.Hay tantas cosas en común entre los nuevos aliados que no sorprende su acuerdo, aun cuando están frescas las rimbombantes declaraciones de Johnny candidato, amenazando con acciones en la Fiscalía y Contraloría para investigar las “graves irregularidades” que estuvo observando en la gestión Percy-Sosa. Queda claro no solo que UCS no fiscalizará nada, sino que SPT tendrá allanado el camino para “ir por lo que (le) falta hacer”. Todo, claro, con la venia de los dos tercios de vecinos que votaron por ambos.La gran interrogante ahora es qué hará el otro tercio representado por los concejales del MAS, ¿mantendrá la línea opositora y de fiscalización sugerida por su excandidato a alcalde o sucumbirá a la fuerza que junta el hambre con las ganas de comer… incautos?El Deber – Santa Cruz