Libertad de expresión

elio-pedrazaElio Pedraza Vargas*La libertad de expresión es una elemental condición existencial para el hombre y no cabe la menor duda que hace posible la plena e íntegra manifestación de su condición humana, caso contrario deberíamos estar entre barrotes del desarreglo.Nuestra Constitución Política del Estado nos da el derecho a emitir libremente las ideas por cualquier medio de difusión, sin censura previa, es decir; de forma oral, escrita o visual, individual o colectiva.Entonces, es oportuno y de manera sencilla indicar que el arte es el concepto que engloba todas las creaciones realizadas por el ser humano para expresar una visión sensible acerca del mundo, ya sea real o imaginaria. El Arte nos permite expresar ideas, emociones, percepciones y sensaciones. Para ello podemos utilizar recursos plásticos, lingüísticos o sonoros.Para desgracia de la cultura sobran ejemplos de obras de arte que han sido dañadas en un ataque de locura, tal vez para llamar la atención a su protesta, en nombre del arte u otros fines que no justifican en ningún momento el accionar; porque lejos de estar enmarcado en la tolerancia, el respeto al prójimo, al deseo de vivir en armonía y dejar al hombre de libre pensamiento expresarse a través de su arte, sea éste llamado “arte urbano”, social de protesta e incluso de firmas, demuestra una intolerancia hacia su prójimo, y actúa como queriendo a través de la fuerza, imponer un criterio lejos de toda forma civilizada y que mayormente es el camino de todo ser humano.Por ejemplo “La Piedad” de Miguel Ángel fue atacada al grito de “soy Jesucristo”, “La Ronda de Noche” de Rembrandt, fue acuchillada y logra cortar el lienzo un profesor en nombre de Jesús o “Venus del espejo”, de Diego Velázquez, la cual fue acuchillada siete veces en protesta por el arresto de Emmeline Pankhurst quien era líder de un movimiento que reivindicaba el voto de las mujeres, pero también el motivo encerraba el desagrado que se tenía por como los hombres contemplaban como un objeto bello a la Diosa.En el año 2007, el artista y quien es docente de la carrera de arte de la Facultad de Ciencias del Hábitat, Diseño y Arte, Lorgio Vaca, en Montero su mural en donde estaba representada la Whipala y Ernesto “che” Guevara, sufrió un atentado: “A la cara, a la cara” “coreaba enardecido medio centenar de personas a un hombre que con un martillo y un cincel removía la imagen del Che Guevara de uno de los murales realizados a pedido del municipio de Montero a Vaca el pasado 18 de enero”.O cuando el artista Alfredo Müller también fue criticado y censurado por sus cuadros desnudos, que aparentemente denigraban a una parte de esa sociedad encerrada en el conservadurismo que aún florece en pleno siglo XXI y que ha sido florecido recientemente en una Facultad que como carrera tiene el Arte.En el año 2013, un grupo de estudiantes egresados de la misma Facultad solicitan los muros para llevar adelante un concurso internacional de graffitis, el mismo que fue aceptado por los miembros del Consejo Facultativo. Craso error cometido por el Decano, pues desde ese momento la situación del día a día fue una constante lucha diaria.Estudiantes se autoproclamaron defensores de la identidad y consideraron que los graffitis habían convertido sus muros en un “carnaval” o que el criterio del conductor de un taxi era que más parecía lugar de pandilleros, y otros aterrados, defendían su obra e insistían en que no se tenía derecho alguno a modificar su proyecto, el cual ya pertenecía a la Universidad Autónoma “Gabriel René Moreno”.Pero. Siempre lo habrá. El graffiti en la expresión ideológica al igual que la actitud de quien se opone, es como lo define Gramsci “una concepción del mundo que se manifiesta implícitamente en el arte, en el derecho, en la actividad económica, en todas las manifestaciones de la vida intelectual y colectiva”, en definitiva el graffiti incluye dos contenidos muy importantes que no son parte del discurso oficial; la vida cotidiana entendida como pequeña existencia y el pensamiento espontáneo de la gente reflejado en la política no institucional.El graffiti ¿es un vandalismo o es un arte?, para quienes conocen del graffiti no todo es vandalismo, porque hoy en día es el lenguaje urbano y está ocupando algunas galerías de arte e incluso la Casa de la Cultura prestó sus muros para el desenfreno imaginativo de los artistas del graffiti.El graffiti en nuestra ciudad ha venido ganando legitimidad como esa “otra” forma de expresión artística, dejando de lado aún sin proponérselo, la marginalidad y el anonimato. En otras palabras el graffiti se está revalorizando y representa un rescate del significado de la calle como lugar de intercambio comunicativo, es una reconquista de la calle como espacio a disposición de toda la población.Y tendríamos que preguntarnos ¿por qué no la Universidad?, ¿por qué no una Facultad que lleva dentro de su vientre la carrera de Arte y que profesionaliza artistas y arquitectos y diseñadores?“Porque sin duda –como lo escribe, Juhani Pallasmaa, en Los ojos de la piel-, el arte del ojo ha producido edificios imponentes y dignos de reflexión, pero no ha facilitado el arraigo humano en el mundo”.Porque ya es tiempo de enarbolar las banderas de la idea del derecho a la ciudad, porque éste no surge primordialmente de diversas fascinaciones y modas intelectuales, sino de las calles, de los barrios, como un grito de socorro de gente oprimida en tiempos desesperados.*Comunicador social y abogado