Hipotecados por el fracaso de la Evonomics

evo-ChinaFranz Rafael Barrios GonzálezEn los días pasados, el Gobierno, anunció que contratará $7 mil millones de deuda pública externa a través de un crédito chino, seguramente a cambio de negocios con nuestros recursos naturales, y lo que es peor, por encima del valor de las Reservas Internacionales.Para empezar, las deudas públicas interna y externa, juntas y a la fecha, superan los $10.118 millones. Y sumados los $7.400 millones chinos comprometidos, el Estado llegaría a deber $17.518 millones, es decir $2.930 mil millones más que las Reservas Internacionales que alcanzan a $14.588 mil millones aprox., lo que equivaldría a prestarse dinero sin tener respaldo alguno.Resulta irónico que en estos días que festejan a Evo como «el mandatario con más años en el poder de manera continua», mendiguen $ 7mil millones a los chinos para disimular el descalabro económico plurinacional y simular el supuesto crecimiento económico, en plena campaña de cara al referéndum constitucional.Los plurinacionales necesitan prestarse dinero chino, empeñando nuestra soberanía (reitero a costa de salvajes negocios con nuestros recursos naturales), para aparentar tener «dinero (ajeno) en el bolsillo», creyendo poder camuflar la iliquidez e insolvencia -real- del Estado Plurinacional, cuando en realidad nos están demostrando que la mentada “bonanza económica” NO existe. Con lo que nuestra generación y las venideras habrán sido hipotecadas por el fracaso económico plurinacional que pretende prolongarse más allá del año 2025.Ahora bien, con respecto a las Reservas Internacionales (RI), que eran nuestro respaldo para endeudarnos y que según el oficialismo “superan $14.000 millones”, es menester desmantelar la impostura de dicha cifra. Señalando que las RI “superan los $14.000 millones”, pero, gracias a la misma deuda pública contraída por el Gobierno. Prueba irrefutable de ello es que, por ejemplo, hasta el 19 de septiembre de 2012, las RI “registraban $13.419 millones”. Y después de la emisión de los bonos internacionales por un valor de $500 millones en octubre del mismo año, y tras recibir el Estado los $500 millones, las RI se “incrementaron” hasta llegar a 13.919 millones. Es decir que, los $500 millones que recibió el Estado por concepto de esa 1er emisión de bonos/deuda, los hicieron figurar como parte “indivisa” de la cifra total de los “más de 14.000 millones” de RI.Evidenciándose con ello que, el Gobierno, de manera ficta hace aparecer (o confunde dolosamente) la deuda pública externa como “Reservas Internacionales”. Cuando, por elementales nociones económicas y contables, dicha contratación de deuda pública externa (en el caso señalado de $500 millones), implica ser “pasivo” más no “activo”, como pretender engañar los plurinacionales.Por tanto, a quienes defienden las fictas cifras de las Reservas Internacionales que como respaldo para la contratación de más y millonaria deuda pública ya NO nos sirven, se les aconseja efectuar el sencillo trabajo de aplicar elemental aritmética y restar pasivos de activos -como se hizo en el 2do párrafo de este artículo-, y así obtener el deficitario resultado o la real cifra de las Reservas Internacionales.Por otro lado, tenemos el electoralista anuncio de que “la economía crecerá lo suficiente la presente gestión”, para poder pagarse el doble aguinaldo. Siendo que el doble aguinaldo es, en realidad, el implícito reconocimiento de que, a una década y en puertas de la re(e)elección, el Gobierno, necesita: 1) generarse falsas cifras de (de)crecimiento; y 2) compensarte tus deprimidos ingresos en una economía encarecida, y en la que el devaluado poder adquisitivo del Bs. ya no alcanza para alimentarte, transportarte, vestirte, ni ninguna otra básica necesidad. Es decir que, la insolvente economía plurinacional, ¡necesita -hoy- 14 sueldos para generarte falsas expectativas de que sobrevivirás un año plurinacional!El Gobierno (te) compensa su fracaso económico con la ficción del pago del doble aguinaldo (que en el caso del sector privado es un impuesto a sus utilidades), ¡e hipoteca tu futuro prestándose irresponsablemente dinero chino!