CAMC, una trasnacional mimada entre los gobiernos de la ALBA

Otra deuda, es la que tiene la empresa CAMC con la Gobernación de La Paz, por el canon de protocolización, que asciende a Bs 2 millones. Un asambleísta departamental observa que la compañía firmó contratos antes de tener una subsidiaria en Bolivia

comenzó a producir el ingenio azucarero de san buenaventura es una obra de la camc Un obrero acarrea caña en medio de las cintas transportadoras del ingenio del norte de La Paz

Comenzó a producirel ingenio azucarero de San Buenaventura es una obra de la CAMC
Un obrero acarrea caña en medio de las cintas transportadoras del ingenio del norte de La Paz

De acuerdo con su portal, China CAMC Engineering Co. LTD es una trasnacional que tiene una presencia en América Latina que se remonta a 2005, cuando empezó con proyectos en Venezuela. El país era gobernado por Hugo Chávez y albergó la mayor parte de las obras de la estatal China, antes de que desembarcara en Bolivia, para firmar siete contratos entre 2011 y 2015.



En junio de 2005, figura un proyecto de agua en Venezuela por un costo de $us 80,3 millones y a partir de ahí, la compañía registra alguna actividad en ese país y en octubre de 2011 los chinos realizan una reunión para el establecimiento de CAMC rama Ecuador.

Ese mismo año, aparece su primer contrato con Bolivia. En agosto fue elegido como porveedor de tres taladros para YPFB, gracias a un crédito contraído por el Estado con el Eximbank chino, que obligaba que los $us 60 millones prestados se gastaran en tecnología y proveedor de su misma nacionalidad.

Al año siguiente, firmó el contrato para el ingenio azucarero de San Buenaventura por $us 168 millones. Fue una época prolífica para la CAMC, porque un mes después también lograría una obra grande en Ecuador, el Centro de Seguridad del Proyecto de Comando de Emergencia en Quito.

Así, los tres principales países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), asignaron construcciones a la estatal china. Sus habilidades cubrían especialidades tan distintas como equipos petroleros, centros de seguridad o instalación de industrias.

Para el asesor legal de la compañía, Fernando Cortez, esta presencia no debiera extrañar a nadie, porque CAMC está en cuatro continentes del mundo. “Si le digo que son 50 países, estaría faltando a la verdad, porque creo que su presencia es en más de 100 naciones, con todo tipo de proyectos”, afirmó el jurista.

En Bolivia, la empresa fundó su filial en agosto de 2013, aunque los contratos del suministro de tres equipos de perforación petrolera y la implementación del ingenio de San Buenaventura, en el norte de La Paz, ya figuraban dos años antes en su agenda como “proyectos desarrollados”.

El 27 de agosto, CAMC convocó a la segunda reunión del Consejo de Administración. Allí se trató el ajuste de su estructura organizativa y la propuesta de establecimiento de CAMC Bolivia Branch. Era 2013 y la compañía china comenzaba a cimentar su permanencia en Bolivia. En octubre del mismo año, según esta agenda, se firmó la construcción de la vía férrea Montero-Bulo Bulo.

En 2014 fue el año en que más actividad tuvo en Bolivia. El Gobierno inspeccionaba las obras y daba su visto bueno al trabajo. Cortez, explicó que hasta el momento no hubo observaciones a los proyectos internacionales que encaró CAMC y que el problema por el tramo Montero-Bulo Bulo es una excepción que debe ser resuelta en breve.

Este contrato fue resuelto por el Estado en noviembre del año pasado y pretende cobrarle las boletas de garantía por más de $us 20 millones. En la mayoría de los casos, CAMC accedió a los proyectos por invitación directa o por excepción. De hecho de los siete contratos que tiene en Bolivia, seis fueron por invitación; aunque el asesor legal afirma que en todos los casos los ganaron a través de licitaciones a las que se presentaron.

Cortez dijo que la investigación congresal que se dispuso explicará y aclarará las dudas que existen. Insiste en que no hay observaciones -hasta el momento- sobre los contratos y reiteró la predispocisión de la compañía a ser investigada.

Sin protocolo
Sin embargo, los contratos no se encuentran protocolizados, según informe de la Gobernación de La Paz. Una revisión de las protocolizaciones desde 2000 permitió establecer que los acuerdos entre el Estado boliviano y CAMC no fueron remitidos al notario de Gobierno.

La explicación oficial señala que el contratista, en este caso CAMC, debe pagar el 0,05% del valor del contrato para la protocolización y, de acuerdo con los documentos oficiales, la suma de los siete contratos, alcanza a los Bs 4.015.210.591 y el 0,05% significa Bs 2 millones aproximadamente.

Pese a que el contrato con la estatal china de la construcción de la vía férrea Montero-Bulo bulo tiene como destinatario el notario de Gobierno, en esas oficinas no conocen documento alguno sobre los contratos.

Pero en la Gobernación explicaron que el problema de las protocolizaciones no es de fondo y que generalmente se protocoliza cuando se cierra la obra. Las partes no pueden hacer adendas a los contratos hasta no tener ese documento; algo que no sucedió en Misicuni.

Fuente: eldeber.com.bo