Para Bolivia el crédito de China es más caro frente a otras opciones

La tasa de interés promedio que pagaba el país a China hasta 2014 era de 2,7%, mientras que los organismos multilaterales cobraban 1,8%, según datos del BCB. El país asiático obliga a prestatarios a comprar bienes y servicios.

El crédito de China es más caro frente a otras opciones

 El crédito de China es más caro frente a otras opcionesPágina Siete / Luis Escóbar / La PazLa tasa de interés promedio del crédito chino contratado por  Bolivia asciende a 2,7% y es más alta respecto al costo promedio de los préstamos que  se solicitaron de fuentes bilateral y multilateral.Según datos del Banco Central de Bolivia (BCB) a diciembre de 2014 -recopilados por la Fundación Jubileo-, la tasa de rédito que cobraba el gigante asiático   era superior al 1,8% de   la CAF-Banco de Desarrollo de América Latina, o el  2,1% del  Banco Interamericano de Desarrollo (BID) o al 0,8% del Banco Mundial (BM) (ver gráfica).A nivel bilateral, sólo Argentina, con 3,2%, estaba por encima de China, pero la deuda no superaba los 3,2 millones de dólares.La Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en el texto Análisis   comparativo de los préstamos chinos en América Latina, ratifica que las tasas de China  son más caras.»A los efectos de comparar las tasas de interés de los bancos Ex-Im de China y Estados Unidos, eliminamos las primas de ‘riesgo país’ de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico)  para compensar el hecho de que algunos países son más riesgosos que otros. Estas primas son sustanciosas, ya que agregan anualmente un 2,51% sobre los préstamos a Argentina y Ecuador, y un 2,31% sobre los préstamos a Bolivia y Jamaica”, subraya el texto.Para el analista económico Armando Álvarez,  es normal que se tome en cuenta el riesgo país a la hora de dar un crédito.»Un prestamista o un inversionista que va a prestar a determinado país toma en cuenta el riesgo asociado a él.Eso lo hacen todos. Pero esa característica de tomar en cuenta el riesgo es normal y lo hacen todos. Si se comparan las tasas de unos y otros, los más riesgosos tienden a pagar una tasa superior”, explicó.A noviembre de 2015, la deuda externa del país ascendía a  6.175 millones de dólares. El 8,3% de los créditos fue contratado  con  la República Popular de China.Patricia Miranda, analista de la Fundación Jubileo,  agregó que el Gobierno también contrajo   deuda interna del Tesoro General de la Nación (TGN), sin tomar en cuenta créditos intra-sector público.En octubre del año pasado, el presidente Evo Morales anunció el compromiso de un crédito chino por 7.000 millones  de dólares. El dinero será empleado en proyectos de infraestructura vial y energía eléctrica. Además, dijo que hay la disposición de  dar curso a una segunda línea de crédito de hasta por 10.000  millones de dólares.El analista económico y expresidente del Banco Central de Bolivia (BCB) Armando Méndez sostuvo que se debe tener cuidado con la deuda.  «Hay que ser cuidadoso con la deuda. A la larga es un peso. Europa atraviesa una crisis económica hace 10 años porque se endeudó mucho. Bolivia tuvo un gran problema de la deuda en el pasado, que se le condonó. Hay que tener cuidado con el endeudamiento en general, no sólo con China”, manifestó.El expresidente del BCB Juan Antonio Morales opinó, en 2015, que el crédito chino  aparentemente  es ventajoso, pero es más costoso. «No  son transparentes, se desquitan en  precio; en lugar de que algo cueste 100  se cobra 200.   Son créditos ‘atados’ a proyectos, no son de libre disponibilidad, en los que uno, recibiendo el dinero, puede seleccionar quién puede proveer la  maquinaria o equipo que se necesita o a las constructoras”, alertó.Recursos  sin condicionamiento político, pero con obligacionesLos créditos contraídos con la República Popular de China no tienen condicionamientos políticos,  como remarcó el Gobierno, pero sí obliga a comprar sus bienes y servicios.»En el pasado se criticó las condiciones del FMI o el BM, que condicionaban  la política pública. Decían que les vamos a prestar, pero deben privatizar, deben reducir el gasto corriente. Sin embargo, los créditos bilaterales también traen obligaciones”, dijo la analista de la Fundación Jubileo, Patricia Miranda.La principal condición es que no se puede elegir en  una licitación pública a la mejor  empresa que pueda ejecutar el proyecto con el financiamiento obtenido. «O ver   mejores  costos, eficiencia, calidad del trabajo. Puede reducirse a una gama pequeña de empresas, en este caso chinas, que están dispuestas a venir y trabajaren el país”, explicó.El analista Gonzalo Chávez advirtió que «estos son los créditos más peligrosos en economía porque definitivamente uno no sabe qué proveedores tendrá. Pueden ser de muy mala calidad o tal vez  buena calidad”, dijo.El vicepresidente Álvaro García Linera aclaró   que China no condiciona «políticamente” el crédito que otorga a Bolivia, a diferencia de otros países que  sí se involucraban en asuntos internos.Punto de vistaJuan Carlos NúñezDirector Fundación Jubileo PIB podría bajar y subir la deudaEs cierto que hay estándares internacionales que definen la relación del porcentaje de endeudamiento de un país con el crecimiento del PIB.En este momento, Bolivia tiene una deuda del 17,9% en relación al PIB y sumada a la deuda interna del 8%, estamos hablando de un total del 26% de deuda pública.Otro elemento importante es caracterizar el PIB. En un  país con alta dependencia en  la generación de ingresos gracias a la explotación de los recursos naturales,  estamos hablando de un PIB volátil que depende de la suerte de los precios internacionales de comodities.Cuidado que en los próximos años el tamaño del PIB se reduzca  y, por tanto, nuestro endeudamiento se haya incrementado. Acá viene la gran consulta -por lo menos desde Jubileo no la conocemos-  de un estudio de sostenibilidad del endeudamiento público.Suponemos que las entidades encargadas deberían tener estos estudios, pero no los hacen públicos. Cuando hablamos de la sostenibilidad del endeudamiento, nos referimos a que debe ser un estudio que demuestre cómo vamos a pagar en el mediano y largo plazo.Ese estudio  debe demostrar que nuestra economía va a poder responder a estos compromisos que dejamos a las siguientes generaciones. Este es un llamado de atención a los parlamentarios y exigir  al Ejecutivo estos estudios.