Negarlo hasta la muerte

KAREN-OK1Karen ArauzLa picardía popular le ha aumentado a las tablas recibidas por Moisés un par de mandamientos: «nunca hacerse pescar», y: «si te pescan, niégate hasta la muerte». Parece que la administración masista, fanatizada, se lo ha tomado en serio. La Mentira -con mayúscula- es el sello imborrable de este Gobierno. Es una mancha que permanecerá y de la que no se librarán hasta el fin de los tiempos. No debemos aceptar ser ejemplo paradigmático del experimento castro-chavista que no solo ha llevado al abismo a Venezuela, sino que ha causado profundo daño -esperemos que reparable en el tiempo- de las dos más grandes economías de la región como la argentina y la brasileña. Lo dramático de estos movimientos de alto voltaje es que están relacionados más que a una deficiente administración, a un asalto delincuencial de las arcas públicas y a una absoluta degradación de valores éticos.A la corrupción y las maniobras pro impunidad -en el caso puntual de Bolivia- se suma la sistemática desinstitucionalización del Estado que ha provocado un peligroso sentimiento de indefensión colectiva, que bien puede desencadenar en un brote del instinto de autodefensa, que suele ser irracional e imprevisible. La posición del partido de gobierno a nivel de funcionarios de alto rango lo único que hace es echar más leña al fuego. Reiterativamente se ha apuntado a la absoluta falta de cordura y la ausencia de uno solo de los que fungen de voceros, que baje los decibeles en la confrontación.Los bolivianos estamos confrontados. Y los llamados a poner paños fríos al  crispado ambiente que se ha vuelto irrespirable ante el resultado del referéndum que imposibilita sin lugar a dudas la postulación de Evo Morales en la próximas elecciones de 2019, se pintan como los futuros responsables de la debacle. En reafirmación de su estilo particular de enfrentar a la opinión pública, el presidente no falla en demostrar la nula experiencia adquirida en una década. La recurrente falta de honestidad intelectual es lo que baja la línea de acción del oficialismo que con matices anda llevando a sus adláteres por la ruta del descrédito general.La Comisión de la Asamblea creada para establecer la verdad sobre una denuncia puntual claramente es una nueva farsa por cuanto la idea no era volver a algunos semianalfabetos asambleístas en expertos técnicos siempre listos para viajar y cobrar viáticos.  Difícil imaginar qué sabe la diputada Rivera, por ejemplo,  de un taladro de perforación de pozos hidrocarburíferos. Y lo mismo pasa con la letra muerta de los contratos. La negativa de esa Comisión para citar por lo menos a la Sra. Zapata, a Quintana, a Ardaya y a una decena de personeros del Gobierno que arrojasen luces despejando al menos ciertas dudas, se ha reducido a una trampa falaz y vergonzosa. Necesitamos saber qué  resortes del poder y con quiénes estableció vínculos Zapata para lograr que sea CAMC la beneficiada de archimillonarios contratos cuando sus estados financieros están más o menos, en mandarín. Vale decir, ininteligibles. Porque bastó un par de apariciones públicas de Gabriela Zapata para dejar en claro que sus aptitudes, conocimiento y habilidades distan mucho de alguien que pueda lograr un lobby exitoso de esas dimensiones.A preguntas de obvio interés público, Evo Morales se estrella groseramente contra los periodistas, Romero abandona descontrolado un set de televisión, los ministros de Autonomías y Defensa se pintan solos para trabajar con Laura Bozo y acá nadie da una explicación medianamente coherente.  Ninguno tiene el valor civil y moral de reconocer que el tema exige una explicación. El escándalo del Fondo Indígena permanece relajado, respirando con tranquilidad agradecido por la aparición de uno nuevo y encima, con ribetes eróticos sentimentales. La tragedia de El Alto desnuda lo más ruin del pensamiento del MAS por el que el fin justifica los medios. La alcaldesa Chapetón es la víctima propicia no solo del afán revanchista, sino de los desmanes económicos-administrativos de toda la gestión Patana.Por todo esto y mucho más es incomprensible se ignore la percepción social que ya adivina que el «segundo tiempo» que según Morales le reclaman sus movimientos sociales, cocaleros y enriquecidos jerarcas, va encaminado a pretender un nuevo referéndum, o alguna maniobra apoyada en su mayoría legislativa pasando por encima la decisión soberana. La campaña 2019 no se ha tomado ni una pausa. Y al parecer no se detendrán en usar todo lo que esté a su alcance. Incluido el tema marítimo. La inversión de 60 mil millones en esta etapa, provoca un sonrisa al igual que el nuevo brote paranoico antiimperialista que establece que  Estados Unidos está nervioso por la inversiones chinas y rusas en Bolivia y que lo de CAMC se ha armado por interés geopolítico del imperio.Es bueno tener autoestima, pero es muy peligroso darle la espalda a la realidad. Pese a que es notable la tolerancia que demostramos ante hechos de corrupción y su cadena sin fin de impunidad,  nadie ha dicho que esa tolerancia será indefinida. Los mandamientos extras están muy bien para la broma. Pero mentir cínicamente para ocultar otras mentiras, en una esclavitud sin salida.El Día – Santa Cruz