Defensa de Pinto dice que hubo contactos con un familiar de Zapata, pero no para un plan de fuga

 

El abogado del exsenador Róger Pinto dijo que hubo una comunicación el día en que Gabriela Zapata fue detenida en Bolivia y luego otra días después. Aseguró que el objetivo fue averiguar la situación legal del exlegislador por la preocupación que existe por la seguridad del hijo de la hoy acusada por ocho delitos.



El abogado del exsenador Róger Pinto, Fernándo Tiburcio

El abogado del exsenador Róger Pinto, Fernándo Tiburcio

La Razón Digital / Baldwin Montero / La Paz 

Fernando Tiburcio, abogado del exsenador Róger Pinto, reveló hoy que su cliente sostuvo contactos con un familiar de Gabriela Zapata, quien consultó al exlegislador sobre su situación de refugio en Brasil, probablemente con el afán de sacar de Bolivia al hijo de la expareja del presidente Evo Morales, hoy recluida en un penal de La Paz acusada por ocho delitos.

La revelación la hizo esta mañana, en contacto telefónico desde Brasil con el programa ‘Levántate Bolivia’ que se transmite por Cadena A. Dijo que la primera comunicación con Pinto se registró el mismo día de la captura de Zapata, el 26 de febrero, y que hubo una segunda, tres o cuatro días después de esa fecha.

No obstante, negó que hayan existido contactos entre su cliente y Gabriela Zapata con el objetivo de planificar su salida del país para luego buscar refugio en Brasil, tal como insinuó ayer el ministro de Gobierno, Carlos Romero, respaldado en una publicación de prensa que hizo hace dos días el diario Estadão del vecino país.

“Lo que sí hubo es contactos de un familiar de Gabriela Zapata, que llamó a Róger Pinto preguntándole sobre las condiciones de su caso… ¿Por qué llamó a Róger Pinto ese familiar de Gabriela Zapata? Porque estaba extremadamente preocupado por la situación del hijo de Gabriela Zapata. Si hay alguien que se pensó en quitar de Bolivia fue al hijo de Gabriela Zapata, tanto que su familiar dijo que los primeros días mantuvieron al niño escondido en Cochabamba por miedo a lo que le pudiese pasar”, afirmó Tiburcio.

Ayer, el ministro Romero informó que Zapata fue detenida porque las unidades de inteligencia de la Policía habían detectado riesgo de fuga, información que coincide con la nota publicada por  Estadão, según la cual familiares de la ahora reclusa se contactaron con el exsenador Pinto, quien el año pasado consiguió refugio en Brasil tras escapar en 2013, acusado de delitos de corrupción.

“Si me preguntan si esta versión (periodística) es correcta, lo que les puedo decir es que coincide en el aspecto relativo a un plan de fuga respecto a la información recibida por inteligencia de la Policía”, afirmó el ministro.

Hoy, el abogado de Pinto dijo que no hubo contactos con ese objetivo y sugirió al ministro que presente pruebas para sostener sus afirmaciones. Por el contrario, consideró que su objetivo es cambiar el enfoque de este caso para sustentar una tesis de conspiración y evitar que se revele la información que conoce Zapata.

Zapata fue gerente comercial de la empresa china CAMC, con la que el gobierno boliviano firmó contratos por más de 500 millones de dólares. Su vínculo sentimental con el Presidente y su papel en la firma asiática fue revelado públicamente el 3 de febrero por el periodista cruceño Carlos Valverde.

Tiburcio consideró hoy que, además del probable tráfico de influencias en este caso, lo que debería preocupar es la seguridad del hijo que Zapata sostiene que tuvo con el Presidente y que hasta hoy no fue presentado públicamente.

Dijo que ese fue justamente el motivo por el que el familiar de Zapata buscó a su cliente en Brasil. “Sintieron que estaba todo el  peso del gobierno boliviano encima del niño, lo que parece estar ocurriendo hasta este momento. Ese niño corre el riesgo y tengo que  exhortar al comisariato de las Naciones Unidas en Bolivia que acompañe también el caso del hijo de Gabriela Zapata, que sí corre riesgo”, declaró en Cadena A.