Evo Morales y el papa Francisco analizaron las relaciones entre la Iglesia y el Estado

Viernes 15 de abril de 2016. El presidente Evo Morales y el papa Francisco hoy en El Vaticano. Foto ABI

Durante la entrega de regalos, el Presidente aprovechó para entregarle a Francisco una carta de la Central Obrera Boliviana (COB) y la Conalcam (Coordinadora Nacional por el Cambio), sobre las últimas manifestaciones de la Iglesia Católica en Bolivia. Recomendó al pontífice consumir coca.

 La Razón Digital / Baldwin Montero / La Paz

 



El presidente Evo Morales y el papa Francisco se reunieron hoy en el Vaticano y hablaron de las relaciones entre la Iglesia Católica y el Estado Plurinacional de Bolivia, según se informa en un comunicado oficial.

No se conoció en detalle el contenido de esa conversación, aunque un comunicado emitido por el Vaticano (que en parte fue reproducido por la agencia de noticias EFE) informa que la audiencia se celebró «en una atmósfera de cordialidad» y se trataron «algunos temas concernientes a la actual coyuntura socioeconómica del país, considerando especialmente las políticas sociales».

«Se habló de las relaciones entre la Iglesia y el Estado, recordando la larga tradición cristiana de Bolivia y la contribución decisiva de la Iglesia a la vida de la Nación», detalla el documento.

El asunto fue tratado en momentos en que el gobierno de Morales mantiene una crispada relación con los jerarcas de la Iglesia Católica en Bolivia a raíz de una carta pastoral en la que cuestionaron los resultados de la lucha antidrogas y alertaron sobre la penetración del narcotráfico en instituciones del país.

Esto provocó que el Presidente exija a los miembros de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB) que identifiquen a los funcionarios involucrados en el narcotráfico, lo que hasta ahora no ocurrió.

Hace exactamente una semana, el vicepresidente Álvaro García Linera sugirió una “renovación sustancial” en la cúpula de la Iglesia Católica de Bolivia, porque consideró que sus miembros se alejaron de los pobres y de sus principios por su “cercanía con el oropel”.

“Uno no puede meterse en una institución privada, pero está claro que donde tiene que haber una renovación sustancial de ciertas jerarquías, de los mandos superiores, es en el ámbito de la Iglesia Católica, que ha tenido un distanciamiento de los humildes y de los pobres”, declaró en conferencia de prensa en el Palacio de Gobierno.

Consumo de coca

Hoy, según informó desde el Vaticano la agencia EFE, Morales se reunió con Francisco, con quien abordó la actual coyuntura socioeconómica del país y le regaló tres libros sobre los beneficios de la coca, cuyo consumo le aconsejó.

La conversación duró 27 minutos y se realizó en la Biblioteca del Palacio Apostólico del Vaticano.

«Hermano papa», exclamó el mandatario al llegar al encuentro con el pontífice, con quien se abrazó y a quien expresó que estaba «muy contento» de volver a verlo.

Según el comunicado del Vaticano, la audiencia se celebró «en una atmósfera de cordialidad» y se trataron «algunos temas concernientes a la actual coyuntura socioeconómica del país, considerando especialmente las políticas sociales».

«También hubo referencias a cuestiones de interés común, como la educación, la sanidad y la ayuda a los pobres».

Por último, añadió la Santa Sede, «se examinaron algunas situaciones internacionales».

Morales, informa EFE, regaló al pontífice tres libros sobre el cultivo andino titulados: «Coca, la dieta citogénica», «Coca, un biobanco» y «La coca contra la obesidad».

 «Yo la estoy tomando y me hace bien. Se lo recomiendo y así aguanta toda la vida», dijo Morales al papa al entregarle los libros.

También le regaló un busto de madera de Tupac Katari, líder indígena de la etnia aymara «que fue descuartizado en 1781 por los españoles», según explicó el presidente boliviano al papa Francisco.

Como anécdota, Morales le dijo al pontífice: «fíjese, de la localidad de la que yo vengo el santo patrón es san Francisco de Asís. Yo llegué al sindicato san Francisco y ahora tenemos al papa Francisco».

El papa, por su parte, le obsequió con el medallón de San Martín de Tours, patrón de Buenos Aires y símbolo del amor hacia los pobres, un presente que suele entregar en las audiencias privadas, así como la reciente exhortación sobre la familia «Amoris Laetitia».

También le entregó un ejemplar de «El nombre de Dios es Misericordia», su libro entrevista, publicado hace unos meses.

Carta de la COB

Durante la entrega de regalos, el Presidente aprovechó para entregarle una carta de la Central Obrera Boliviana (COB) y la Conalcam (Coordinadora Nacional por el Cambio), sobre las últimas manifestaciones de la Iglesia católica en Bolivia.

«Aquí tiene usted la carta de los movimientos sociales y todo el material», dijo Morales a Francisco.

El presidente había anunciado antes de su llegada al Vaticano que hablaría con el papa sobre ese asunto, después de que el pasado 1 de abril la Conferencia Episcopal Boliviana alertara en un documento de que el narcotráfico había penetrado en las estructuras del Estado.

Morales rechazó esas acusaciones y pidió a la Iglesia boliviana que diese los nombres de quienes pensaban tenían relación con el narcotráfico.

El presidente de Bolivia fue acompañado a la audiencia con el papa por su canciller, David Choquehuanca; la encargada de negocios de la Embajada boliviana ante la Santa Sede, Erika Farfan, y su jefa de Gabinete, Patricia Hermosa.

Morales y el papa se reunieron por primera vez en el Vaticano en 2013 durante una audiencia, ocasión en la que hablaron de la lucha contra la pobreza.

El líder boliviano le obsequió entonces con un libro sobre la reivindicación de una salida al mar para su país.