Vecindario hostil

HUMBERTOVACAFLORRecuerdos del presenteHumberto Vacaflor Ganam Quizá era previsible que en este momento los países vecinos estén tan molestos con Bolivia, a tal punto que comienzan a cerrar sus fronteras, pero algo debían haber sospechado los electores bolivianos cuando, en 2005, eligieron al cocalero Evo Morales como presidente.Cuando la señora Dilma Rouseff era suspendida del cargo de presidente de Brasil, y asumía como ministro de Relaciones Exteriores don José Serra, quien en 2010 había acusado a Morales de ser cómplice del narcotráfico, el gobierno de Mauricio Macri estaba cerrando la frontera boliviano-argentina.Serra dijo hace seis años, cuando participaba en la campaña presidencial, que la carretera por el TIPNIS, que el presidente boliviano quería construir de todos modos, era “a rodovía da cocaína” y decía que era imposible que 90% de la cocaína que ingresa a Brasil desde Bolivia no sea un negocio que goce de la complicidad del gobierno boliviano.Y Macri, en Argentina, recibió en diciembre pasado el encargo de la Corte Suprema de Justicia de su país, de la Conferencia Episcopal y las veinte mayores universidades, además de los electores argentinos, de frenar el narcotráfico, que “pone en riesgo la existencia de la República Argentina”.Mientras la señora Rouseff estaba lamentando que el parlamento democrático de su país la suspenda de la presidencia, los pobladores de la ciudad fronteriza de Villazón estaban cumpliendo su segundo día de protestas y bloqueos porque las autoridades argentinas aplican mayores controles al tráfico fronterizo de personas.Una valla de 500 metros se había levantado ya entre Villazón y La Quiaca por parte de Argentina, porque ese país quiere evitar que siga ingresando la droga y el contrabando desde Bolivia.Es probable que Serra, con el respaldo de Michel Temer, lo que se aplique una política parecida en la frontera boliviano-brasileña, sólo para impedir el ingreso de la droga boliviana a ese país.En suma, que la coca y la droga que se producen en Bolivia están ahora movilizando a los principales países vecinos, decididos a aislar a Bolivia, a someterla a una especie de cuarentena.El bloqueo de Bolivia llega del brazo del bloqueador. ¿Todos los bolivianos van a sufrir las consecuencias de una actividad ilegal en la que no todos ellos participan? ¿Justos por pecadores? ¿O los justos van a marcar las diferencias?  Fuente: Vacaflor.obolog.com