Si dicen la verdad, se va el ministro

valverdeokCarlos ValverdeDeben creer que somos muy boludos, ingenuos o idiotas… (porque saben que no militamos).Digo… si la idea de salvar al Ministro por el escándalo de muebles y alfombras, va por el lado de defenestrar a dos funcionarias del Ministerio por ‘excesos’ en licitación para compra de alfombras y muebles es, no sólo un abuso en la persona de María Lina Arcienega Quiroga, directora general de asuntos administrativos, y Janette Vega Torrico, jefa de la unidad administrativa del Ministerio. sino una intención de tapar lo que se hace en ese Ministerio.¿Quieren que creamos que «las funcionarias» se extralimitaron? ¿En serio? ¿Nos quieren decir que 2 funcionarias de tercer nivel (Ministro 1, Vice Ministros 2) determinaron su presupuesto o, lo que es peor, no tenían límite de gasto, por decisión de ellas mismas (propia)?¿En serio tenían la chequera abierta para disponer lo que sea del «gusto de ellas» y que no seguían una lógica de gasto tales como: Despacho del Ministro: monto más alto – 1; Despacho Vice Ministros, monto 2, Sala de reuniones del Ministro- Monto 3, por ejemplo?¿En serio quieren que creamos que las funcionarias determinaron todo, sin presupuesto o, sin techo presupuestario?¿O el tema de los errores garrafales pasa por las «alfombras iraníes o indias»? ¿Y si tenían presupuesto para ese tipo de alfombras, porqué no las iban a requerir? (la licitación fue pública, es decir, no se estaban escondiendo los gastos). Digo, si a alguien le dicen que tiene un «monto X» para alfombras, pues buscará alfombras para los lugares que determinen los asesores en decoración, en función del monto que le fue asignado.¿En serio quieren que pensemos que el Ministro Arce Catadora nunca se fijó en eso? ¿O tenemos que creer, al contrario, que el Ministro «no se fijó en gastos» (para equipar y amoblar su palacio personal)? Me inclino por creer esto último, salvo que pretendan que creamos que Arce Catacora es un pusilánime al que un empleado le dice que le abra la chequera y que él (ellas) se encarga(n) de gastar.Por más que me esfuerzo, no logro convencerme de que por ahí pueda estar la cosa!!! Y eso que estoy convencido que el Ministro está acostumbrado a que le digan qué hacer y cómo «dibujar» las cifras… pero, no, esta vez, creo que nadie le dijo qué hacer a él, creo que lo más seguro es que él les haya dicho a las funcionarias… ustedes gasten, que este es el Ministerio más importante, al fin de cuentas, yo soy el mejor Ministro y soy el que «dibuja las cifras»…El problema fue que los pillaron y entonces, echan a las funcionarias que lo único que tienen que hacer es algo muy sencillo: decile al país cuánto era su disponibilidad de gasto para la adquisición de «suntuarios», muebles y… cuánto debía gastarse en el baño del Ministro (y eso que no es ahí donde se va a mandar sus mayores cagadas, sino en el escritorio que, en este caso, asciende como a 51.000 bolivianos).Digo… ¿y si nos dicen la verdad… una vez aunque sea?(No pueden, se tendría que ir el Ministro).Fuente: Muro de Carlos Valverde en Facebook