El grupo yihadista atacó una base aérea clave cerca de la ciudad de Homs, donde destruyó tres naves y asesinó brutalmente a un hombre. Aseguran que se trata de un miembro de las múltiples milicias chiitas provenientes de países de todo el mundo árabe para combatir a los terroristas
Un combatiente afgano fue decapitado por el Estado Islámico durante un ataque a una base militar cerca de Homs, según mostraron las imágenes divulgadas por el grupo terrorista.
Los yihadistas, envalentonados por la recuperación de Palmira, atacaron tres puestos de control y llegaron hasta el aeropuerto T4, una terminal de importancia estratégica para las fuerzas en Siria que combaten al ISIS.
Aunque la base no fue arrebatada del control gubernamental, los terroristas asesinaron a un combatiente afgano y mostraron las imágenes de su cuerpo decapitado. El comunicado del ISIS no aclaró si la decapitación fue el motivo de la muerte o si fue realizada para difundir propaganda luego del asesinato.
El combatiente pertenecía a la milicia Brigada Fatimí, una organización chiita afgana formada en el 2014 para ayudar al régimen sirio a combatir a los insurgentes sunitas.
El ISIS también compartió la imagen de una de las naves sirias que destruyeron.
Las fuerzas que combaten en apoyo al dictador sirio Bashar al Assad están constituidas en su mayoría por extranjeros. Según un reciente informe, de las 66 milicias, sólo 18 -es decir, el 27 por ciento- son sirias.
La coalición pro Assad cuenta con milicias de Palestina, el Líbano, Irak, Afganistán, Pakistán, Bahrein y Yemen.
Fuente: infobae.com