Diferentes asociaciones de periodistas cuestionan que el Gobierno de Evo Morales contrate un periodista extranjero para denigrar a periodistas bolivianos.
Gremios denuncian intento de acallar a medios y periodistas con documental gubernamental
Diferentes asociaciones de periodistas cuestionan que el Gobierno contrate un periodista extranjero para denigrar a periodistas bolivianos.Página Siete Digital / La PazLa Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB), la Asociación de Periodistas de La Paz (APLP) y las ocho asociaciones departamentales afiliadas denunciaron hoy el intento del Gobierno de pretender acallar las voces de periodistas y de medios de comunicación a través de la difusión del documental «El cártel de la mentira”.»La difusión masiva de este documental, financiado por el Ministerio de la Presidencia, es parte de la estrategia gubernamental para amedrentar y desprestigiar la labor de los trabajadores de la información”, señala un comunicado de las asociaciones.»Denunciamos a la opinión pública nacional e internacional la intención gubernamental de acallar la voz de periodistas y medios de comunicación que no le son afines”, complementa el documento.Hoy por la noche se presentará el documental en diversas salas de cine del país, de manera gratuita, además habrá un acto especial en el Banco Central de Bolivia, en la ciudad de La Paz, donde se realizará la presentación oficial.El documental, elaborado por el periodista argentino Daniel Salari, que trabaja en el canal oficialista Abya Yala, es una «incitación a la violencia, maltrato y desprestigio” a los periodistas que están involucrados en el mismo, señala el comunicado conjunto de las asociaciones.En esa línea, el gremio, a tiempo de cuestionar que se haya contratado a un periodista extranjero para denigrar a periodistas bolivianos, responsabilizó al Gobierno de cualquier tipo de violencia que vaya a afectar a los involucrados en el documental.El documental a exhibirse hoy cuestiona el rol que jugaron medios como Página Siete, El Deber, Los Tiempos, la Agencia de Noticias Fides, Erbol y periodistas como Andrés Gómez, Amalia Pando y otros en el caso de Gabriela Zapata, expareja del presidente Evo Morales, y el hijo que ambos tuvieron, el cual, al final del escándalo, se dio por muerto y que nunca existió, según versión de autoridades de Gobierno.