Xavier Albó o las verdades dichas en la cara del poder

El sacerdote, junto a su colega, el también español Mauricio Bacardit, recibió en mayo el Cóndor de Los Andes por su compromiso por los pobres. Albó criticó a los adulones y defendió el derecho a ser un “librepensante”.XAVIER ALBÓXavier Albó acudió al Palacio de Gobierno a recibir su medalla, donde decidió no callar. Foto: Página SietePersonaje destacado 2016La Paz, 26 de diciembre (ANF).- Xavier Albó es uno de los sacerdotes más carismáticos de Bolivia. Conocido por sus posiciones progresistas, el jesuita Albó hizo noticia en 2016 por sus posturas independientes del Gobierno de Evo Morales, hacia el que sintió simpatía en años anteriores.Varias de las columnas que publica Albó en La Razón mostraron su carácter autónomo, pero fue especialmente impactante el discurso que dio en el Palacio de Gobierno, frente a las máximas autoridades, en el que criticó al presidente Evo Morales.En un escenario en el que los reproches a Morales realizados en su presencia son virtualmente nulos, el discurso de Albó generó interés nacional. El sacerdote, junto a su colega, el también español Mauricio Bacardit, recibió en mayo el Cóndor de Los Andes por su compromiso por los pobres. Ambos viven desde hace décadas en el país y tienen nacionalidad boliviana.Dos de las ideas del discurso de Albó fueron su insistencia en que se debe eliminar las adulaciones al poder y proteger a los “librepensantes”, contradiciendo así al vicepresidente Álvaro García Linera, quien al respecto dijo que éstos no tienen cabida en el MAS.Según Albó, el “ama llunk’u” (no seas adulón) y “ama ch’in” (no callar) deben sumarse a la tradicional trilogía andina del “ama sua” (no seas ladrón), “ama llulla” (no seas mentiroso) y “ama q’ella” (no seas flojo).“Voy a empezar con dos síntesis de mi vida a propósito del ama llulla, ama sua, ama q’ella; hay que ponerle dos yapas (…). Las dos yapas son ama llunk’u y ama (ch’in). No ser, hay muchas maneras de decir, lame bota es lo que significa (…) quiere decir no ser adulón de otra gente y el ch’iñallaychu, es decir no callar, ya lo dijo Luis Espinal: ‘callar es lo mismo que mentir’ (…) esto es muy importante”, indicó el sacerdote.Espinal era otro cura jesuita, compañero de habitación de Albó, quien fue asesinado por paramilitares en 1980.Otras de las apreciaciones de Albó fue resaltar el hecho de que “suma qamaña” o “vivir bien” debería incluir la necesidad de “convivir bien con la naturaleza y con los distintos”. Ello fue considerado también como una crítica al Gobierno, que ordenó ingresar a las áreas protegidas para explorar y explotar petróleo.Albó también se definió ser un “librepensante casado al proceso de cambio” dijo que no renunciará a esa característica y que incluso estaría dispuesto a devolver la condecoración antes de perder la posibilidad de expresarse libremente.“Espero nunca perder” la “posibilidad de decir libremente lo que quiero decir”, agregó.