El repostular a Evo Morales devela seis peligros a la Constitución

Detalles. Se sintetizan riesgos a la soberanía del pueblo, la independencia de los órganos del Estado, la naturaleza de la Carta Magna, el derecho al sufragio y la modificación al art. 168.

El repostular a Evo devela seis peligros a la CPE

Desde diversas miradas de constitucionalistas.El-repostular-a-Evo-devela-seis-peligros-a-la-CPERef. Fotografia: Fortaleza. La Constitución aprobada y refrendada vía consulta popular el 2009 ahora el MAS pone en duda y busca modificarla.La repostulación hacia un cuarto mandato del presidente Evo Morales, planteada mediante cuatro viales “supuestamente” legales por las organizaciones sociales del Movimiento Al Socialismo(MAS) y luego aceptada por el propio mandatario, en el análisis de ex magistrados y abogados constitucionalistas, peligrosamente vulnera al menos seis principios de la Constitución Política del Estado (CPE) y las bases de la democracia.Entre ellos, destaca el abogado constitucionalista, Carlos Alarcón, que con dicha intención manifiesta del Gobierno no solamente se están socavando las propias bases de su legalidad y legitimidad constitucional para este segundo periodo de gobierno, sino se atenta contra la CPE, la soberanía popular y la democracia. «Con todo esto estamos ya ante un escenario de dictadura, obviamente debemos defender del voto del NO (del referéndum del 21 de febrero 2016) en las calles», precisó.Entre los seis peligros. José Luis Santistevan, abogado constitucionalista, describe cuáles son esos seis peligros más notorios que provocaría cualquiera de las cuatro «vías constitucionales» sugeridas y refrendadas por el IX Congreso del MAS en diciembre de 2016 para hacer posibles una tercera reelección presidencial de Morales.Primero, señala Santistevan, vulnera la soberanía del pueblo y el sistema de gobierno, que sigue siendo republicano, es decir, violenta la democracia directa que ejercen los ciudadanos por intermedio de la soberanía del pueblo, cuyo instrumento es el referéndum y es la máxima expresión de la democracia.El segundo peligro tiene que ver con que vulnera la independencia de órganos porque se pretende obligar en forma inconstitucional a los órganos electoral y judicial a que se habilite a una persona que por mandato de la constitución está inhabilitada.El tercero, vulnera la naturaleza y la base fundamental de la constitución, cuya función esencial «se constituye en una carta de garantías», su máxima expresión es el respeto al estado de derecho, cuando se pretende habilitar como candidato a una persona inhabilitada por mandato de la constitución. «De consolidarse esta violación, la constitución dejará de ser una carta de garantías», argumenta el constitucionalista.Un cuarto peligro, es que vulnera el derecho al sufragio que tienen todos los ciudadanos, por cuanto se pretende desconocer un resultado ya definido y que tiene carácter vinculante (obligatorio) y que no puede repetirse para el mismo tema ya resuelto mediante el voto.El quinto aspecto tiene que ver con que se vulnera y atenta contra la unidad del país, por cuanto se pretende desconocer el voto ejercido por los ciudadanos al margen de la constitución y habilitar una persona cuyo mandato de inhabilitación se encuentra en la constitución.Santistevan cierra como la sexta preocupación es que se vulnera la forma de modificación parcial del texto constitucional, aprobado mediante asamblea constituyente y por voto popular, cuyo único procedimiento para el artículo 168 ya fue utilizado el 21 de febrero de 2016 y que ahora se pretende nuevamente utilizarlo. «Ello supone desconocer y violentar la única forma de modificación parcial y que un artículo de la constitución puede ser votado una y más veces al margen de la constitución y su procedimiento de reforma parcial», añade.En la misma línea. Coincidente con lo descrito por Santistevan, Silvia Salame, exmagistrada, constitucionalista y actual presidente del Colegio de Abogados de Chuquisaca, sustenta que cualquiera de las formas de «repostulación» vulneraría los principios, valores, derechos y garantías proclamados en la constitución.»El ejercicio del poder político está sometido a la condición básica de la legitimación democrática, la cual precisamente en este caso se da en el límite temporal al ejercicio de los cargos y la alternabilidad en el ejercicio del Gobierno. Pues la reelección inmediata y continua está proscrita en el sistema constitucional boliviano vigente», argumenta la jurista.Por su parte, Teresa Arana, presidente del Colegio de Abogados de Cochabamba, señala que el simple hecho de “forzar” una reelección cuando la CPE cierra cualquier posibilidad en ese sentido, es un atropello flagrante a los principios establecidos en ella que pone en riesgo la convivencia democrática en los próximos años. «Cualquiera de las alternativas vulnera los principios constitucionales y forzar la reelección pone en riesgo, el régimen democrático hacia un periodo de inestabilidad política y democrática», apuntó.En tanto Marcelo Arrázola, abogado constitucionalista y presidente del Colegio de Abogados de Santa Cruz, señala que la repostulación del presidente Evo Morales, ya fue objeto de consulta el pasado 21 de febrero, cuyo resultado del “No” fue definitivo y por principio de preclusión, no se puede reconsiderar. «No tiene asidero legal el plantear la nulidad del referéndum. Cuestionar lo que ya ha sido resuelto en las urnas, luego de que el tiempo oportuno para las observaciones ya pasó, no es posible. Lo contrario es ir contra de la constitución», precisó.Salame enfatiza que ningún caso se puede invocar como fundamento de la reelección: “la soberanía popular”, dado que reside en el pueblo y ella no permite vulnerar la CPE.Todas implican vulnerar la CPE. El jurista William Bascopé, quien fuera parte de la redacción en la Asamblea Constituyente de la actual CPE, argumentó que las cuatro vías, supuestamente mecanismos legales  sugeridos por el MAS, no hacen otra cosa que revelar en la misma dimensión una violación del sistema constitucional vigente.Mientras el MAS propone aprobar una nueva reforma constitucional por dos tercios de voto de la Asamblea Legislativa; Bascopé refuta que dicha instancia no está facultada para modificar la CPE sino a aprobar leyes complementarias a la Carta Magna.»Solamente puede aprobar una ley para llevar adelante una reforma constitucional que esté sometida a un referéndum. Y ese mecanismo de la iniciativa legislativa ya ha sido utilizado el 21 de febrero”, enfatizó. Además, la Ley de Régimen Electoral establece el «principio de preclusión”, que implica que los resultados de elecciones o referendos no pueden ser revisados ni repetidos.El otro grave atropello tiene que ver con el artículo 411 de la CPE, donde la propuesta del MAS plantea vía la iniciativa popular, recolectar firmas del 20% del padrón electoral. Bascopé cita que no es posible dado que para la reforma parcial de la Constitución se puede realizar por iniciativa popular o por iniciativa legislativa. «Queda claro que dice ‘o’, no así ‘y’. Por eso ahora la Constitución cierra esa posibilidad», complementó.Con respecto al mecanismo de la renuncia seis meses antes del presidente del Estado para habilitarse como candidato, el jurista señala que ni en la CPE y menos en la Ley de Régimen Electoral existe esa posibilidad. » Hay en ello solo una interpretación antojadiza de la Constitución», argumentó.Y la cuarta vía propuesta por el MAS, a través de una  ley interpretativa en la ALP para luego llevarla a consulta del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), según Bascopé ya no es posible dado que ese mecanismo ya fue interpretado con anterioridad para dar lugar al referéndum del pasado 21 de febrero. «En cualquiera de las cuatro vías, el MAS lo que pretende es violentar la Constitución», precisó.Alarcón cierra el análisis al citar que la ciudadanía, en el ejercicio de sus derechos, es el llamado a dar su veredicto final, pese a que el Gobierno tiene definido el fin para alterar las reglas claras.Apuntes• Los movimientos sociales creen que el referéndum del 21 de febrero y el rotundo NO de dicho resultado fue una farsa previamente montada en base a la mentira del caso Zapata que desorientó al pueblo.• Ellos, en base a esa situación, conciben que sin Evo Morales a la cabeza, queda en serio riesgo el “proceso de cambio” basada en su Agenda Patriótica 2025.• La oposición, en todo este periodo a partir del referéndum del 21 de febrero, tampoco ha logrado capitalizar a su favor una opción o alternativa política al MAS, para gestar un proyecto.• Los juristas invocan a las diferentes instancias como el Tribunal Supremo Electoral y el Tribunal Constitucional, dar fe y cumplimiento con lo establecido en la CPE y las normativas vigentes.OficialismoAl interior del MAS apuntan al resarcimientoPropuesta. Rolando  Borda, dirigente de la Central Obrera Departamental (COD), quien como presidente dirigió el Presidium del IX Congreso del MAS realizado en diciembre de 2016, señaló que la propuesta de la repostulación se basó en base al respeto de la Constitución. Incluso, destacó que de darse la repostulación será de beneficio para todos los niveles del Estado, incluido gobernadores y alcaldes municipales.Reflexión. A partir de ese Congreso, los movimientos sociales no se detuvieron en su afán de materializar las vías legales para la repostulación hacia otro mandato de Evo Morales. Pidieron la anulación de los resultados del referéndum del 21 de febrero 2016, donde la población le dice No a la repostulación. Ante esa situación, el procurador general del Estado, Héctor Arce Zaconeta, en contacto con medios de La Paz, advirtió que jurídicamente no es posible anular esos resultados.Figuras. El presidente del Senado, José Alberto Gonzales, dijo en los últimos días que luego de haberse descartado la anulación del referendo del 21 de febrero de 2016, es posible encontrar otra vía constitucional que permita llevar a Morales a la reelección en 2019.Punto de vistaSilvia SalameAbogado Constitucionalista «El resarcimiento político no es válido’En ningún caso se puede invocar como fundamento de la reelección la soberanía popular, pues el principio de la soberanía popular es la voluntad del pueblo es decir el poder mismo, ello no puede dar lugar a que el pueblo que es titular de la soberanía vulnere el ordenamiento constitucional.Dar curso a esa posición, constituye un continuismo y no del proyecto político, sino de las personas, anulando las posibilidades de que ese proyecto continúe con otros protagonistas, debilitando así la democracia.Decimos que se empobrece la Democracia, porque las autoridades en el ejercicio del poder, tendrán ventajas frente a otros contendores, pues el que pretende continuar tendrá todo el aparato Estatal a su servicio que le permitan convertir la gestión en campaña de reelección, hecho que produce una brecha profunda entre los candidatos, que en definitiva genera una concentración de poder que vulnera el principio de separación de poderes (Art. 12 de la CPE).Por lo general la decisión de perpetuarse en el gobierno no siempre responde a prolongar una buena gestión, sino más por el contrario ocultar los malos manejos. En Bolivia, la Constitución podemos decir que es cerrada. Expresamente en el artículo 168 prohíbe la posibilidad de una reelección por más de dos periodos.Además, la idea de un resarcimiento político, no es válida pues el referéndum fue un escenario democrático válido.La posibilidad de que se realice una renuncia si bien en ningún lugar de la Constitución dice que está permitido o que está prohibido, aplicando el mismo razonamiento no existe asidero constitucional para la reelección por un cuarto mandato, sin embargo, hacerlo, constituiría una burla a la voluntad expresada en el Referéndum”.Punto de vistaMarcelo SilvaAnalista Político«El MAS apura su propuesta para evitar fricciones internas’“Mas allá de la prolija defensa jurídica que hacen los expertos en derecho constitucional sobre el tema de la reelección del presidente Evo Morales, considero que el MAS al insistir políticamente al poco tiempo de los resultados del referéndum del 21 de febrero de 2016, tiene finalidades políticas incluso que están más allá del tema en consideración actual.Prácticamente quedan tres años de gestión. En ese contexto, una primera finalidad tiene que ver  con que era necesario establecer ciertos criterios de unidad y organización alrededor de Evo Morales.Entonces había que dar las certezas, al interior del MAS que a nivel externo, de que el partido de gobierno no tiene otra carta o no va a tener otro liderazgo visible en los próximos años que no sea Evo Morales. El otro tema tiene que ver con el hecho que el 21 de febrero se hubiese perdido el referéndum, y bajo el plano estrictamente legal y formal, hasta ahora, mientras no se utilicen mecanismos que se han anunciado, el presidente Morales no puede ser nuevamente candidato. Ese hecho estaba generando fricciones al interior del MAS y debilitando la cohesión interna del partido de gobierno. Por eso creo que el MAS se apura, con el Congreso y vuelve a insistir en la reelección, pero para evitar la atomización y la falta de respeto incluso, que se estaba gestando en torno a Evo Morales. Ahora todo gira alrededor del presidente.Fuente: EL DÍA