Son muchas consecuencias las que desata la depresión en una persona, más allá de debilitar su salud, su estado anímico es lo que se ve grandemente afectado influyendo así en su rutina.
Desde cumplir con deberes como el trabajo o estudios hasta actividades cotidianas como el aseo personal y prepararse de comer implican un gran esfuerzo de la persona que padece esta enfermedad, es por eso que llama la atención el cambio en el cabello de esta mujer.
La estilista Kate Langman, de The Salon en Ulta Beauty, compartió la experiencia que tuvo con una clienta: unas semanas antes de su cita, la chica fue a comprar algunos productos en el salón y le contó que llevaba seis meses luchando para salir de la cama y recuperarse de una crisis depresiva.
Como no quería lidiar con su cabello, lo amarró en un gran moño que después no pudo desenredar. “El moño estaba tan enmarañado que se sentía como si tuviera rocas en la parte trasera de su cabeza”, dijo Kate.
La estilista le agendó una cita para el día siguiente, sin embargo, la muchacha nunca llegó. Volvió a citarla un par de veces más en las siguientes semanas y tampoco asistió, se puede decir que la cancelación de planes es uno de los síntomas de la depresión.
Finalmente la joven volvió y entonces ocurrió la transformación.
Entre desenredar su cabello, teñirlo y cortarlo, el proceso duró casi ocho horas. Pero valió la pena:
“Al final pude ver el brillo en sus ojos y el color rosa en sus mejillas, pues estaba muy contenta; no sólo porque podía volver a pasar los dedos por su cabello, sino porque se sentía como ella misma otra vez”, escribió Kate en Facebook. “Hoy le cambié la vida a alguien y nunca lo olvidaré”.
Esta historia nos describe la realidad de la depresión, que cada vez más la padecen muchas personas sin importar el género ni la edad. Por lo que es muy importante el autocuidado en el estado de ánimo y la salud mental.
Y no podemos olvidarnos de la generosidad que muestran las personas y que son capaces de cambiar vidas.
Fuente: whatthegirl.com