Nueve loros

La imagen puede contener: pájaro*Richard Arispe CarrascoA lo largo de mi vida siempre me gustó tener la compañía de loros, son buenas mascotas porque se les puede enseñar muchas cosas, imitan la voz humana, repiten onomatopeyas, estribillos de canciones, piropos y también insultos. Son el deleite de las visitas porque la primera cosa que te preguntan es, ¿hablan? Otros más temerosos preguntarán ¿muerden?Curiosamente estas aves aprenden todo lo que se les enseñan y lo repiten miles de veces, casi hasta el cansancio, todos los amantes de estas especies emplumadas saben que aprenden muy rápido los piropos y las malas palabras. Lo raro con estas aves es que nunca logran aprender palabras complejas y compuestas por ejemplo corrupción, sobreprecio, contrabando, cocaína, coima, volteo, fraude, reelección, etc.Comen de todo y variado, pero siempre dejan la mesa muy desordenada con las migas tiradas por todos lados. Son muy celosos con la comida, pues no permiten que se les quite nada, todo les sirve hasta esos pequeños pedazos que aparentemente han sido descartados. Cuidado con intentar quitarles algo, he conocido casos en que han “mordido” ferozmente.Otra curiosidad es que les gusta estar en jaulas, allí se sienten protegidos, como en casa. Son pocos los casos en que abandonan su jaula y huyen. Pues siempre tienen las plumas de las alas cortadas, con el objetivo que jamás puedan alzar vuelo a la libertad. Hoy está prohibido tener estas especies en cautiverio, pero existen algunos que siguen usándolas para sus propósitos.Un día mis loros se pasaron a la casa del vecino y destruyeron algunas cosas, el vecino conocido en el barrio como Don Huaso aseguró que mis loros intentaron robar y destruir su propiedad, pero yo que conozco mis 9 loros sabía que mi vecino mentía, alegué para que me las devuelva sin daño alguno, pero tuve que pagar 50 bs por su supuesto mal comportamiento.En fin ya están en casa, no olvidaron lo aprendido y ahora seguiré enseñándoles lo que me plazca, para eso son mis loros, para divertirme.Fuente: FB/Richard Arispe, Periodista