Simón Bolívar, animado y para niños

La película venezolana ‘Pequeños héroes’ inicia en Francia su recorrido por los festivales de animación del mundo

Fotograma de 'Pequeños héroes'.
Fotograma de 'Pequeños héroes'.

Simón Bolívar fue una de las figuras más destacadas de la independencia de América además de fundar la Gran Colombia y Bolivia. Muchos han sido los proyectos cinematográficos que han retratado su vida. El más reciente es Pequeños héroes, un filme animado ambientado en la revolución de 1800 y contado a través de los ojos de tres niños que auxilian al Libertador en su batalla contra los españoles. La producción venezolana ha arrancado su ruta por los festivales mostrando un fragmente en Annecy, el certamen más importante del mundo del género de animación.



El argentino Juan Pablo Buscarini, director de Pequeños Héroes, cuenta que el proyecto comenzó a gestarse en 2010. La productora Orinoco Films le presentó la idea a él, al guionista Enrique Cortés y a la historiadora Carmen Bohórquez. La cinta es la primera producción venezolana que integra la selección oficial de Annecy, compuesta por 229 cintas y elegida de un total de 2.850 películas de 95 países.

“La idea era hacer una película, tecnológicamente y artísticamente de primer nivel, para estrenarla en todo Latinoamérica y el mundo. Quería dirigir y contar historias de aventuras para conocer algo de Historia, no a partir de la cuestión pedagógica como en la escuela, si no en un cine”, afirma Buscarini.

La figura de Bolívar ha sido retratada en cintas de animación como el corto venezolano Bolívar, ése soy yo (1994) y el colombiano Bolívar, El Héroe (2003). Buscarini explica lo difícil que es hacer que los niños se identifiquen con un personaje que es un militar adulto. Por ello surgieron otros personajes: Arturo, el hijo de un criollo; Tico, un niño de padres esclavos y Pilar, una niña mestiza fruto de la unión de un español y una indígena. Los infantes se juntan con la misión de hacerle llegar al estratega caraqueño el secreto que le ayudará a vencer al ejército enemigo. “A través de los caminos de los niños uno cuenta o transmite los puntos y los valores de toda la gesta. Nos permitió ser fieles a la historia sin la necesidad de seguir rigurosamente el camino de Bolívar”, precisa el director.

Tecnológicamente, la película coproducida por Villa del Cine destaca por ser la primera producción animada en América Latina que utiliza la técnica de captura de movimiento. Esta forma de animación puede ser vista en El expreso polar, Beowulf o la versión de 2011 de El planeta de los simios. “No es una película tipo cartoon en la que los personajes den una vuelta en el aire, rompan las leyes de la física, caigan y terminen en el suelo como un huevo frito. Esta es una película donde todos tienen un comportamiento natural y un tipo de animación realista de los personajes”, añade Buscarini.

Una voz propia para la animación latinoamericana

Este proceso de animación se llevó a cabo en Londres y tomó aproximadamente tres meses entre la preproducción, grabación y el modelado de personajes. El director cree que esta técnica les ahorró por lo menos un año y medio o dos si hubieran elegido hacer la animación por computadora.

Para el realizador argentino es complicado abordar una producción animada y tratar de competir de igual a igual con presupuestos gigantes como los de Pixar, Dreamworks o Illumination Entertainment. Argentina, Colombia o Venezuela no cuentan con los recursos humanos que pueden ser hallados en estudios de India o Asia, que pueden contar con 300 ó 400 animadores cada uno. Por esto Latinoamérica debe apostar por la diferenciación: “El continente debe encontrar una personalidad en animación o, como Pequeños héroes, focalizarse en contar sus propias historias”, reflexiona Buscarini.

El cineasta utiliza de ejemplo La historia de un oso, el cortometraje que dio a Chile su primer Oscar en la categoría de animación. Imitar o hacer productos similares a los de Pixar es “someterse a odiosas comparaciones”, según Buscarini. “La inteligencia de las historias propias, de nuestros propios mitos y personajes, es donde está la clave, es a lo que nos tenemos que dedicar”, afirma.

Buscarini tiene otras películas de animación como El ratón Pérez y El arca. Dice que toda la experiencia en Annecy es “inmejorable”. El prestigio del certamen ha puesto a esta producción venezolana en “una vidriera internacional muy importante”. En las próximos meses, Pequeños héroes participará en festivales de animación o infantiles en Palm Springs, en California, o en Busán, en Corea del Sur.

Fuente: elpais.com