Metamorfosis populista



El 22 de octubre habrá elecciones legislativas en Argentina y la expresidente Cristina Fernández será candidata a senadora por “Unidad Ciudadana”, una nueva sigla partidaria que agrupa a los dirigentes kirchneristas, casi todos agobiados por acusaciones de corrupción que los podrían mandar a la cárcel. En la opinión pública existe el convencimiento de que están buscando cómo salvarse de una condena a través de la inmunidad parlamentaria y nadie más que ellos dar la señal inequívoca de que solo buscan el salvavidas. La exmandataria, que se hizo famosa por sus costosas prendas de vestir, sus joyas y sus poses de reina de la moda, ha estado luciendo como una dirigente sencilla, con ropas de clase media, un discurso muy suave, alejado del tono envalentonado e hiriente que la caracterizaba. En lugar de atacar al oficialismo conducido por Mauricio Macri con esa retórica socialista tan encendida, no halla como encontrar palabras para camuflarse y lucir como si fuera una luchadora contra la corrupción y el derroche, banderas que precisamente usa el macrismo. Vale como experimento de la metamorfosis que comenzarán a sufrir todos los populistas de la región.

Fuente: eldia.com.bo