Miss Universo, el cantante pop y la conexión rusa

Una compleja urdidumbre relacional conecta indirectamente a Trump Jr. con el Kremlin.Donald TrumpDonald Trump con Miss Universo 2012, Olivia Culpo, en el concurso de belleza de 2013 celebrado en Moscú. GETTYWashington  / J.M.A.La trama rusa golpea otra vez al presidente de Estados Unidos. La reunión mantenida por su hijo mayor, Donald Trump Jr., con una abogada rusa que prometía información dañina contra Hillary Clinton da nuevos bríos a la hipótesis de una colusión entre el equipo electoral republicano y el Kremlin. En el encuentro participaron el yerno del magnate, Jared Kushner, y el entonces jefe de campaña, Paul Manafort. El lugar elegido fue la Torre Trump, símbolo del imperio familiar y punto neurálgico de sus operaciones electorales.La abogada, Natalia Veselnitskaya, ha sido relacionada con el Kremlin, pero nadie lo ha podido demostrar. En Nueva York se presenta como una lobista que defiende los intereses de rusos sancionados por EEUU. En el pasado, las agencias de inteligencia investigaron sus actividades.El hijo de Trump asegura haberla contactado a través de un agente musical, Rob Goldstone, a quien conoció en la celebración en 2013 de un concurso de Miss Universo que organizó su padre en Moscú. Goldstone representa al cantante pop Emin Agaralov, cuya familia mantiene estrechos contactos con el Kremlin. En especial su padre, el constructor Aras Agalarov. Este patrocinó el concurso de belleza y es cercano a la órbita de Vladímir Putin, quien le galardonó con la orden de honor de la Federación Rusa.Trump con el cantante pop Emin Agalarov y a la derecha su padre, Aras Agalarov.Trump con el cantante pop Emin Agalarov y a la derecha su padre, Aras Agalarov.Emin Agaralov, a través de su agente musical, hizo saber a Trump Jr. que una abogada iba a darle “información de que personas vinculadas con Rusia estaban financiando al Comité Nacional Demócrata y apoyando a Hillary Clinton”. La reunión fue acordada para el 9 de junio de 2016. La expectativa era alta, pero pronto Trump Jr. se decepcionó: «Sus declaraciones eran vagas, ambiguas y no tenían sentido. No ofreció ningún detalle o información. Rápidamente quedó claro que carecía de datos de interés”.Pese a esta falta de concreción, la cita prosiguió y la abogada, siempre según esta versión, giró su interés hacia los rusos sancionados por Washington. “Me quedó claro entonces que esa era su verdadera agenda y que la oferta de información potencialmente útil no era más que un pretexto para la reunión”, afirma el vástago del presidente. Veselnitskaya ha negado tener ningún trato con el Kremlin y ha insistido en que durante la cita, celebrada dos semanas después del nombramiento como candidato de Trump, no se discutió ningún tema electoral.El encuentro revela el inusitado interés del clan Trump por obtener información contra Clinton y su proximidad a la órbita rusa. Manafort, el jefe de campaña presente en la reunión, es conocido por sus fuertes lazos con Moscú y tuvo que dimitir por sus oscuros intereses en Ucrania. Kushner ha mantenido frecuentes y poco aclarados contactos con el embajador ruso en Washington, Sergéi Kislyak, epicentro de la trama y a quien llegó a pedir un canal de comunicación secreto con Valdímir Putin. A esta lista se ha añadido ahora el hijo mayor de Trump. Un hombre clave en el esquema familiar y que junto a su hermano Eric, es el guardián de la fortuna familiar.elpais.com