Perú: bajo el lema «Que se vayan todos», miles de manifestantes protestan en el centro de Lima

Mientras el Congreso discute la renuncia o destitución del presidente, las encuestas locales arrojan que cerca de la mitad de los peruanos quiere tener elecciones anticipadas.

Manifestantes participan en la marcha «Que se vayan todos», convocada por el colectivo «No a Keiko» hoy, 22 de marzo del 2018, en su recorrido por diversas avenidas del centro histórico de Lima.. EFE / Ernesto Arias



Miles de manifestantes se reunieron esta noche en Lima para mostrar su indignación no solo con el presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski sino con la totalidad del Congreso, que debate si acepta o no la solicitud de renuncia del mandatario en medio de acusaciones de irregularidades.

Las encuestas locales arrojan que cerca de la mitad de los peruanos quieren tener elecciones anticipadas para el Congreso y la presidencia debido a que la confianza en los políticos continúa deteriorándose.

Mientras los legisladores no acepten la renuncia, Kuczynski sigue siendo el mandatario. Si dejara el puesto de manera definitiva, éste recaerá en el primer vicepresidente Martín Vizcarra, quien llegará de Canadá el viernes y recibiría el cargo de manos del presidente del Parlamento, Luis Galarreta.

Manifestantes participan en la marcha "Que se vayan todos", convocada por el colectivo "No a Keiko" hoy, 22 de marzo del 2018, en su recorrido por diversas avenidas del centro histórico de Lima.. EFE / Ernesto Arias

«El país está indignado y asqueado frente a los actos delincuenciales», dijo el legislador Marco Arana cuando se abrió el debate. «Nuestra democracia ha sido herida por cinco presidentes corruptos. El pueblo ya no quiere un solo presidente corrupto más».

«No estamos hablando de un pobre viejito, sino de un pobre ladrón», comentó el legislador izquierdista del Frente Amplio, Wilbert Rozas, cuyo partido está a favor de la destitución de Kuczynski. Otros tres grupos políticos opositores se mostraron de acuerdo en aceptar la renuncia del mandatario.

El destino de Kuczynski se agravó de forma sorpresiva hace 48 horas, cuando la oposición presentó videos ocultos que mostraban a aliados del oficialismo ofreciéndole contratos estatales a un opositor a cambio de su voto en contra de un pedido para destituir al mandatario.

La situación de PPK, como también se le conoce, ya se encontraba muy debilitada porque pendía sobre él un procedimiento de destitución por «incapacidad moral permanente» debido a mentiras sobre sus nexos con la firma brasileña Odebrecht por casi dos décadas, incluso cuando fue un funcionario clave en otra gestión.

Los problemas de Kuczynski no se detendrán incluso cuando deje de ser presidente, porque un fiscal que investiga la corrupción local de Odebrecht presentó el jueves un pedido a un juez para que prohíba su salida del país, lo cual se decidirá cuando deje de ser mandatario.

La fiscalía investiga los pagos de Odebrecht a empresas ligadas a Kuczynski que recibieron dinero antes de que asumiera la presidencia en 2016.

El debate en el Parlamento peruano hace recordar uno parecido en el 2000, cuando los legisladores tuvieron que elegir entre aceptar la renuncia enviada desde Japón del entonces mandatario Alberto Fujimori o su vacancia por «incapacidad moral permanente».

Al final se lo destituyó por «incapacidad moral permanente» tras su década de gobierno (1990-2000) marcada por violaciones a los derechos humanos y corrupción. En 2009 Fujimori fue condenado a 25 años de prisión por su responsabilidad en 25 asesinatos, pero Kuczynski lo indultó en diciembre.

De forma irónica, ahora el destino de Kuczynski se debate entre la aceptación de su renuncia o su destitución por incapacidad.

Fuente: AP

Fuente: clarin.com