Mesa sugiere «separación de poderes real» para la lucha contra la corrupción

El expresidente Carlos Mesa afirmó que la corrupción ha golpeado dramáticamente a la política en América Latina porque es un «virus» que se contagia por igual a gobiernos de derecha, de centro y de izquierda, y consideró que sólo un Estado con poderes separados e independientes puede empezar a combatir este flagelo.

«¿Puede la sociedad combatir el flagelo? Ese es el desafío. La única respuesta está en ella misma. A fin de cuentas, el comportamiento colectivo se transfiere a la responsabilidad pública, pero es evidente que este argumento es insuficiente. Se debe dotar a las instituciones del Estado de una fortaleza en la que se sumen la idoneidad, la transparencia y los límites al poder. Hoy, más que nunca, es imprescindible contar con una separación de poderes real, no escrita en papel mojado», expresó en su columna de opinión publicada en Los Tiempos.



Dijo que se debe impedir cualquier mecanismo que ayude a la discrecionalidad de los «poderosos», que recurren a instrumentos legales o a la vía de la permanencia indefinida en el poder nacional, regional o local.

En ese marco, «nunca había cobrado tanto sentido la afirmación de que el poder total corrompe totalmente», remarcó el también vocero de la demanda marítima.

Agregó que América Latina está perdiendo la fe en sus instituciones, en los partidos políticos que conforman el espectro del juego democrático y en sus líderes.

Por eso, «la política de aquí en más debe mirarse con los ojos de ciudadanos que quieren transparencia como uno de los ejes motores de nuestra vida en común. Menos discursos ideológicos de ideas que sólo construyen superestructuras poco inteligibles y más acciones para probar la verdad de lo que se predica. Sólo un Estado republicano con poderes separados e independientes y con un instrumento judicial idóneo, honesto y fuerte puede comenzar a desvelar la espesa niebla que cubre a la mayor parte de América Latina», apuntó.

En los últimos cuatro años, el caso denominado Lava Jato, que se originó en Brasil, golpeó a varios gobiernos y líderes de la política.

Esta investigación de corrupción incluso derivó en el encarcelamiento del expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, que el pasado sábado se entregó a la Policía para cumplir una condena de 12 años de prisión.

Fuente: lostiempos.com