Alertan sobre la incursión en Bolivia del movimiento antivacunas y señalan a la presentadora Karla Revollo

El famoso estudio Wakefield fue mencionado –aunque sin el dato de su falsedad– en las charlas públicas denominadas Elige sentirte bien, que imparte  la presentadora de televisión Karla Revollo en varias ciudades de Bolivia. El 19 de junio, en una de esas charlas, ante el foro repleto del Cine 6 de Agosto de La Paz, Revollo argumentó  que las vacunas causan autismo, en referencia al desmentido  estudio  Wakefield, y que dañan más de lo que solucionan.  Fue cuestionada allí mismo por un asistente, quien recibió más silbidos que aplausos.

Alertan sobre la incursión en el país del movimiento antivacunas

Promover la no vacunación es irresponsable pues expone a toda la sociedad a enfermedades mortales, coinciden expertos en inmunización y autoridades.Alertan sobre la incursión en el país del movimiento antivacunasUna de las charlas Elige sentirte bien impartida en La Paz por la presentadora de TV y periodista en salud, Karla Revollo.Página Siete / Liliana Carrillo V. / La PazEl movimiento antivacunas, al que se le atribuye  responsabilidad en el rebrote  del virus de sarampión en Europa, ha comenzado a manifestarse en Bolivia. Promover la no vacunación es  irresponsable pues expone a toda la sociedad a enfermedades mortales, alertan expertos y autoridades de Salud.“Si un padre decide no vacunar a sus hijos   no sólo está arriesgando la salud de  ellos sino también la vida de otros niños , quienes son los más vulnerables por la pobreza”, asegura el experto de la (Organización Mundial de la Salud) OMS Washington Toledo. “Todas las vacunas que llegan al país mediante el Programa Ampliado de Inmunización (PAI) están garantizadas y son gratuitas”, dice el director de la entidad gubernamental, Julio Sumi.El movimiento antivacunas tiene  su origen  en Europa en 1998. Ese año,  el médico británico  Andrew Wakefield publicó en la revista The Lanced un estudio  que planteaba una relación entre la vacuna triple viral o RSP (que inmuniza contra sarampión, rubiola y paperas a bebés) con el espectro  autista. Los datos de la investigación resultaron falsos.  Aunque esa publicación fue desmentida por cientos de estudios científicos serias y por la misma revista, el daño ya estaba hecho. Wakefield  perdió la licencia para ejercer la medicina, mientras el movimiento antivacunas iba incubándose en el terreno fértil del miedo y la ignorancia.“Aunque ha sido desmentida, esa  publicación ha tenido efectos,  tanto que en Europa hay una epidemia de sarampión desde hace siete años debido a que algunos padres han decidido no vacunar a sus hijos. En  Bolivia aplicamos la vacuna RSP desde 1979 a unos  cuatro millones de niños y nunca hemos tenido ni un solo caso de autismo y lo que es más significativo, no tenemos ni un caso de sarampión desde el 2000”, asegura el pediatra  Adalid Zamora, presidente del Comité de Inmunizaciones de Bolivia.Adalid Zamora,   Comité de Inmunizaciones de Bolivia.Charlas, nutrición y vacunas El famoso estudio Wakefield fue mencionado –aunque sin el dato de su falsedad– en las charlas públicas denominadas Elige sentirte bien, que imparte  la presentadora de televisión Karla Revollo en varias ciudades del país. Se trata de una serie de conferencias gratuitas y masivas en las que ella se presenta como “periodista en salud” y “health coach” (entrenadora en salud)  y aborda temas relacionados a alimentación saludable y cuestiona a  la industria y a la farmacéutica.El 19 de junio, en una de esas charlas, ante el foro repleto del Cine 6 de Agosto, Revollo argumentó  que las vacunas causan autismo, en referencia al desmentido  estudio  Wakefield, y que dañan más de lo que solucionan.  Fue cuestionada allí mismo por un asistente, quien recibió más silbidos que aplausos.Tras el episodio público, un asistente a  esa sesión escribió en las redes sociales: “Que (Karla) se vuelva vegana si quiere, pero que no imponga sus creencias a una población tan vulnerable como la nuestra, donde sólo una parte de la población tiene la capacidad y recursos para poder informarse si lo que ella dice es verídico o no. Ella, siendo comunicadora, lo único que informa son mentiras de la antivacunación”.Revollo asegura hoy que nunca hizo mención al tema: “Sobre el mencionado Andrew Wakefield no hago ni hice nunca mención o referencia por lo tanto no puedo opinar”, respondió mediante carta notariada a un cuestionario de  Página Siete. “Estoy a favor de las vacunas seguras”, dijo.Sostuvo también que no se presenta como “health coach”, aunque ese membrete, junto al de “periodista en salud”, aparece incluso en los afiches promocionales de sus charlas.En el programa Estudio 7, que Karla  Revollo tiene en el canal estatal Bolivia TV, como hace en sus charlas, promociona  el curso denominado  Escuela para pacientes. Este “programa” es   impartido por el doctor  ayurveda Sasha Milenkovich, proveniente de Servia, quien está en gira  por América Latina. Este curso de siete horas tiene un precio de 550 bolivianos. En sus  afiches se promociona como “un programa magistral para sanar definitivamente” y “un acercamiento revolucionario a la sanación a nivel genético y del ADN”.En el seminario, el médico ayurveda aconseja no vacunar a los niños con el argumento de que en   la alimentación saludable está el remedio incluso al cáncer, revelaron  participantes de la Escuela de pacientes. Los “alumnos” pidieron guardar su  identidad por temor a represalias  de sus pares “que creen”  y no permiten discrepancias con el doctor.Página Siete se comunicó con Milenkovich para pedirle una entrevista sobre  el contenido de su curso.  “¿De dónde sacó  mi teléfono? ¿Qué cosa quiere?”, fueron sus respuestas. Sobre las ideas que promueve no quiso hablar. A mucha insistencia pidió un cuestionario  que nunca respondió.“Las vacunas salvan vidas”“No podemos prohibir ideas pero sí recomendar que la gente se informe adecuadamente, con profesionales calificados”, responde el responsable del Programa Ampliado de Inmunización, Julio Sumi a la pregunta de que si alguna instancia oficial supervisa los contenidos de charlas y cursos  sobre  salud.“Lo que sí hay que garantizar es que las vacunas  son buenas, que salvan vidas. Que la vacuna triple viral ocasione el autismo es  totalmente falso. Quienes dan esa información están cometiendo un error y asustando a la población”, recalca.“El problema de algunos cursos es  que  los imparte gente que no es profesional en salud o que no está debidamente actualizada o informada”, comenta el doctor Zamora. “Lo que pasa cuando sale una calumnia es que causa dudas y aunque se aclare hay quienes que nunca creen las aclaraciones”, añade.Coincide el consultor en Inmunización  de la OPS/OMS: “Las vacunas están totalmente garantizadas en toda América y la erradicación de muchas enfermedades es la prueba de ello. Además el tema de vacunas es tan sensible que la OMS lleva un control de calidad de todas las vacunas que se venden a los países, ¿qué quiere decir esto? Los países de las Américas, incluida  Bolivia, son parte del fondo rotatorio que tiene  ventajas como el bajo precio y, lo más importante, la certificación de calidad”, enfatiza el doctor Toledo. Washington Toledo,  experto de la OMS/OPS.Según la Organización Mundial de la Salud, las vacunas  salvan actualmente entre 2 y 3 millones de vidas al año en el mundo. Antes de que se implementara la vacuna gratuita RSP en Bolivia, el sarampión era la segunda causa de mortalidad infantil y dejó altos índices de secuelas como la ceguera o la sordera.“Desde hace 16 años no tenemos sarampión en el país gracias a la vacunación. Cada año el Gobierno aumenta presupuesto para la compra de esta vacuna (cada una cuesta 3,6 dólares o 21,31 bolivianos). El año pasado se ha gastado sólo para la triple viral 4.379.606 bolivanos, sin considerar recursos humanos, informa el doctor Sumi. Añade que para prevenir 21  enfermedades, actualmente el ministerio de Salud invierte más de 90 millones de bolivianos en vacunas. Julio Sumi,  responsable del PAI del Ministerio de Salud.“Nutrición no evita males”Uno de los argumentos de los  antivacunistas es que la  nutrición evita las enfermedades. Y ello, según los especialistas, no es cierto. La buena nutrición, resultado de la alimentación sana,  es un objetivo  permanente, más aún en los niños, pero  no evita el contagio de virus peligros; aunque sí palia sus consecuencias.No tienen lugar afirmaciones como esa de que ‘mi hijo está bien nutrido y no necesita vacuna’. Aún hay casos de polio, de difteria  y de sarampión, como demuestra el brote en Europa con más de 21.000 casos. Debido al creciente flujo migratorio, hay posibilidades de contagiarse y transmitir  enfermedades, aseguran los médicos consultados.“Si la enfermedad  circula y no estamos vacunados, nos vamos a enfermar por más bien nutridos que estemos. Pongamos el caso del sarampión que debilita el sistema inmunológico.  Si un niño malnutrido se contagia tiene altas probabilidades de  complicaciones como una neumonía o una diarrea que lo debilita tanto que lo mata”, ejemplifica Toledo.“El riesgo mayor de no vacunar es que la población más  vulnerable, al no tener niveles óptimos de nutrición, es la más afectada; los que más mueren en una epidemia  son los pobres. Con que haya un contagio en alguien que no esté vacunado,  toda la sociedad está en riesgo”, recalca.El pediatra Adalid Zamora refuerza la vigilancia de los efectos de las dosis de inmunización. “Las vacunas son finalmente un bien social. La gente las ha asumido y lo que no puede pasar es que se pierda confianza en la vacuna. La vacunación de los niños garantiza la protección de los mayores; cuando gran parte de la gente está vacunada el resto está protegida. Hablamos de vidas”.La clave, coinciden todos, es la información seria y respaldada científicamente. “Miremos a Europa, evitemos epidemias, vacunémonos”, recomienda Sumi.¿Qué ganan quienes se oponen a las vacunas?¿Qué ganan los antivacunistas con su campaña contra las inmunizaciones? Algunos creen sincera aunque erradamente que hay un complot farmaceútico que envenena sólo con fines de lucro. “Otros ganan  dinero –expone  el pediatra español Carlos González, autor del libro En defensa de las vacunas–. Existe un negocio en torno al miedo”. La  calidad  de las vacunas es garantizada por el PAI.ArchivoEl creador del movimiento es el médico británico Andrew Wakelfield, quien en 1998 publicó en la  revista The Lancet un estudio que aseguraba que la  vacuna RSP contra el sarampión, las paperas y la rubeola causaba autismo. “El objetivo último de Wakefield era desacreditar la triple vírica para hacerse millonario con vacunas alternativas que había patentado”, dice González.  El estudio se demostró fraudulento; pero quedó el miedo. “Generalmente, quienes deciden no vacunar a sus hijos están muy informados: han leído libros y  páginas de internet, pero están muy mal informados”, explica.