La lactancia materna sigue dividiendo a la población: muchos han aplaudido el gesto, pero otros lo han calificado como «repugnante».
Cuando los más conservadores apelan a lo ‘natural’ para mantenerse firmes en sus convicciones, se olvidan de que aun sigue habiendo prácticas sino naturales, cotidianas que resultan un tabú para millones de personas en todo el mundo. El ejemplo más evidente de este absurdo es el que tiene que ver con la maternidad. Un sector de la población cada vez más reducido considera que las mujeres han nacido para ser madres, pero las castigan cuando ejercen como tal.Algo así le ocurrió ayer a la modelo estadounidense Mara Martin, que decidió salir a la pasarela con su bebé de cinco meses en brazos. No fue una transgresión ni un acto reivindicativo sino una decisión que se tomó in situ. Pero el momento, que se encargó de inmortalizar Sports Illustrated -la revista que organizó el evento-, se hizo viral en cuestión de minutos.Como decíamos, la primera sorprendida fue la maniquí. «No puedo creer que esté saliendo en los medios con mi hija por algo que hago todos los días. Resulta como mínimo irreal. Estoy muy agradecida de poder compartir este mensaje y, con un poco de suerte, de normalizar la lactancia materna y de mostrar a las mujeres que PODEMOS HACERLO TODO», escribió Martin en su cuenta de Instagram. “¡¡¡Pero, para ser sincera, sigo sin poder creer que esto se haya convertido en un titular porque no debería serlo!!! Mi historia como madre y el hecho de haberla amamantando mientras desfilaba es solo eso”, añadió la modelo antes de empezar una larga lista de agradecimientos.Lo que ocurrió realmente fue que el desfile se retrasó y como la niña empezaba a tener hambre, Martin decidió que empezaría a amamantarla antes de salir a escena. Allí estaba la editora de la revista, MJ DAY, que la alentó a salir con ella en brazos; ya que, en ese momento, se encontraba durmiendo.
Una reacción espontánea que ha vuelto a abrir un debate que ya no debería serlo. La mayoría de las personas aplaudieron el gesto, pero otras acusaron a la modelo de buscar protagonismo y de ser incapaz de distinguir entre el ámbito público y el privado. En cualquier caso, lo que todos deberíamos preguntarnos después de ser partícipes de una reacción de este tipo es por qué amamantar sigue resultando un acto “repugnante”.
Fuente: revistavanityfair.es