Los peligros de las hazañas para YouTube

Las cataratas Shannon constan de una serie de peñascos de hasta 335 metros y un sistema de remansos naturales en la cima de las cataratas.CreditGregory Simpson/ BC Parks

Tres estrellas de las redes sociales, que vivían de viajar por todo el mundo y narrar sus experiencias en internet, murieron el 3 de julio luego de un accidente en las cataratas Shannon, a unos 50 kilómetros al norte de Vancouver en la Columbia Británica.

Charles Ryker Gamble, Alexey Lyakh y Megan Scraper pertenecían al grupo canadiense High on Life, una marca en línea que promueve viajes y un estilo de vida aventurero entre cientos de miles de seguidores.



Las autoridades recuperaron sus cuerpos, que cayeron unos treinta metros mientras nadaban en la cima de las cataratas Shannon, anunció la Real Policía Montada de Canadá mediante una declaración. La policía no identificó a las víctimas, pero High on Life publicó una declaración el viernes que confirmaba que tres “queridos amigos” de la comunidad habían muerto.

“Su filosofía era el optimismo, la valentía y vivir al máximo cada día”, sostuvo High on Life en un comunicado, y añadió que Gamble, Lyakh y Scraper habían compartido esos valores con personas de todo el mundo.

Charles Ryker Gamble formó el grupo «High on Life» con dos amigos de la preparatoria.Creditvía GoFundMe

“Aunque los hayamos perdido de esta manera tan trágica, su filosofía sigue viva en todos nosotros, y ahora es nuestra responsabilidad seguir difundiendo su mensaje”, indica la declaración.

El accidente fue impactante y devastador para los seguidores del trío, algunos dijeron que los inspiraban y motivaban a creer que ellos también podían hacer realidad sus fantasías de viajar. Sin embargo, otros aprovecharon su muerte para advertir sobre los peligros de un estilo de vida intrépido a los espectadores en línea.

High on Life es el resultado de una colaboración entre Gamble, Lyakh y otro amigo, Parker Heuser, quienes se conocieron en la preparatoria, según dice la página de Facebook del grupo. Narraban sus correrías en un canal de YouTube, publicaban fotografías de lugares de todo el mundo para más de un millón de seguidores en Instagram y vendían en línea camisetas y otras prendas de vestir.

La consigna de su estilo de vida al aire libre es: “Si puedes hacerlo, debes hacerlo”.

No obstante, esa filosofía también se materializaba en acrobacias riesgosas, como saltar de riscos y columpiarse de una cuerda desde alturas extremas. Varios miembros se metieron en problemas en 2016 luego de que se les vio caminando en la enorme y multicolor Gran Fuente Prismática del parque nacional Yellowstone. Gamble y Lyakh, entre otros, se declararon culpables de cargos relacionados con su comportamiento en varios parques nacionales, según el Servicio de Parques Nacionales de Estados Unidos.

Según informes, Lyakh estaba saliendo con Scraper, quien tenía su propio séquito en línea bajo su imagen pública llamada Mindy the Lion. Escribió un libro electrónico, Not Cut Out for the 9-5, acerca de cómo abandonó el mundo corporativo para desarrollar un negocio en línea que le permitiera viajar, según la descripción del libro en su página de Amazon.

Megan Scraper y Alexey Lyakh acumularon un gran número de seguidores en redes sociales mediante publicaciones en Instagram y YouTube. Creditvía GoFundMe

Aún no se sabe qué estaban haciendo en las cataratas Shannon. CBC News reportó que se podía tener acceso al área desde algunas veredas para senderismo y desde una góndola.

El primo de Gamble, Rob Mangelsdorf, le dijo a The Canadian Press que creía que el grupo solo había ido de excursión. “No iban a hacer ninguna tontería”, comentó.

High on Life rechazó una solicitud para hacer comentarios y la Real Policía Montada de Canadá no respondió a la solicitud para conocer más detalles.

El grupo lanzó una página de recaudación de fondos en la que se anunció la creación de un fondo que respaldará a las causas alineadas con los valores de Gamble, Lyakh y Scraper con el fin de “empoderar a otras personas para que persigan sus pasiones y sueños, y vivan la vida al máximo”.

POR SARAH MERVOSHFuente: nytimes.com