Rafael «Ñato» Méndez, el capitán de Bolivia en el Mundial de 1930

En el Mundial Uruguay 1930, el primero de la historia, Bolivia asistió como una de las naciones invitadas por la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF). En esa oportunidad, el país participó con los mejores jugadores del momento, entre los que destaca Rafael «Ñato» Méndez, delantero y capitán de la Verde (que esa vez vistió de blanco).

«Mi papá era el capitán del equipo Bolivia que intervino en el campeonato Mundial de Uruguay. Él tenía entonces 26 años. Él era delantero y se inició en el club Racing de Cochabamba. Le decían ‘Ñato’ por tener una nariz más respingada y pequeña», relató Adolfo Méndez , hijo del recordado primer capitán que tuvo la Selección nacional.



Más allá de la campaña desarrollada por Bolivia en la cita mundialista, las anécdotas de aquella época se van borrando con el tiempo, empero los nombres de aquellos futbolistas quedan impresos en la historia del deporte nacional.

En aquella selección que debutó con camisetas blancas e impresas una letra en el pecho, que juntándose de manera ordenada decía «Viva Uruguay», destacaban jugadores de gran valía en nuestro país: Jesús Bermúdez (arquero), Segundo Durandal, Casino Chevarría, Renato Sainz, Diógenes «Limón» Lara, Jorge Bustamante, Mario Alborta, René Fernández y el mítico «Ñato» Méndez.

Según recordó Adolfo Méndez, su padre era un jugador rápido y muy habilidoso con el balón. Si bien no llegó a marcar ningún gol en el Mundial, «Ñato» Méndez era un futbolista que se ponía el equipo al hombro.

«Recuerdo una anécdota de mi papá, pero no en el Mundial. En un partido, él marcó un gol insólito. Le mandaron un centro al área y dos defensores fueron a marcarlo y lo apretaron entre ambos, haciendo lo que conocemos como ‘sándwich’. Antes de caer, la pelota le llegó a su cabeza y, de rebote, terminó marcando el gol. Él no lo creía», recordó Adolfo.

Los goles anotados (incluido el mencionado) fueron un punto alto para que Rafael Méndez sea seleccionado nacional, además ser jugador emblema de Racing y The Strongest, instituciones deportivas aún vigentes.

Luego de la participación boliviana con derrotas 4-0 ante Yugoslavia y Brasil, «Ñato» Méndez siguió jugando al fútbol, deporte que se vio obligado a frenar por la Guerra del Chaco (1932-1935) .

Méndez acudió al llamado del país para la defensa del territorio patrio. Regresó luego de combatir en el Chaco y formó una familia con Judith Claure.

«Mi papá pasó a la historia del fútbol boliviano por ser el primer capitán de la selección», reiteró Adolfo Méndez.

LOS CAPITANES DE BOLIVIA EN EL MUNDIAL

La selección de fútbol de Bolivia jugó tres mundiales en su historia (Uruguay 1930, Brasil 1950 y Estados Unidos 1994), en 21 ediciones jugadas a la fecha.

En cada edición tuvo un capitán: en 1930 fue Rafael «Ñato» Méndez, en la edición de 1950 estuvo José Bustamente Nava, mientras que en 1994 el cintillo fue entregado a Carlos Fernando Borja.

PERFIL

Rafael Méndez Claure

El legendario jugador cochabambino nació un 1 de enero de 1904. Fue jugador del mítico Racing, club fundado por Félix Capriles. Su buena actuación lo llevó a militar en The Strongest y la selección nacional en los torneos sudamericanos y la Copa del Mundo Uruguay 1930.

Luego de volver de la Guerra del Chaco, «Ñato» Méndez formó su familia con Judith Claure y tuvo seis hijos: Carlos, Enrique (+), Beatriz (+), Adolfo, Gloria y Graciela. Rafael Méndez falleció en su natal Cochabamba en 1977, a los 73 años.

BOLIVIA Y SU CAMPAÑA EN EL MUNDIAL URUGUAY 1930

La campaña de Bolivia en el primer Mundial de la historia que se desarrolló en Uruguay (13 al 30 de julio de 1930), se resumió a dos partidos en el grupo 2: ambos con derrota 4-0 ante Yugoslavia y Brasil.

En su debut ante los europeos, la selección nacional perdió por goleada por los tantos convertidos por Yvan Beck (15′ y 22′ ST), Blagoje Marjanovic (20′ ST) y Djordje Vujadinovic (40′ ST), luego de un primer tiempo en cero y que dejó al elenco nacional con una buena impresión.

En su segunda presentación, el combinado nacional volvió a perder y por el mismo marcador, gracias a los dobletes de Moderato Winsintainer (37′ PT y 28′ ST) y Joao Coelho Neto (22′ y 38′ ST).

Más allá de regresar con las manos vacías, Bolivia marcó dos hitos importantes: fue una de las primeras selecciones del mundo en disputar este evento, además que tuvo a Ulises Saucedo con doble función: entrenador y árbitro.

Saucedo dirigió al Equipo de Todos y participó como juez central el cotejo Argentina 6-3 México, por el grupo 1 y que se disputó el sábado 19 de julio en el estadio Centenario.

También fue juez de línea en los cotejos Argentina 1-0 Francia (15 de julio en Parque Central), Uruguay 4-0 Rumanía (21 de julio en el estadio Centenario), Argentina 3-1 Chile (22 de julio en el estadio Centenario) y la semifinal Uruguay 6-1 Yugoslavia (27 de julio en el Centenario), según destaca Carlos Mesa en su página «Historia del fútbol boliviano».

Saucedo fue gran protagonista del fútbol en aquellas épocas.

Fuente: lostiempos.com