Evo y Sánchez abrirán puerta a empresas españolas para el tren bioceánico

Sánchez y Morales rubricarán este acuerdo en la ciudad de Santa Cruz, donde recalará el presidente del Gobierno de España

EFE



El jefe del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, y el presidente boliviano, Evo Morales, firmarán el próximo martes un acuerdo que abrirá la puerta a la participación de empresas españolas en la construcción del tren bioceánico, un proyecto que unirá los puertos de Ilo (Perú) y Santos (Brasil) a través de Bolivia.

Sánchez y Morales rubricarán este acuerdo en la ciudad de Santa Cruz, donde recalará el presidente del Gobierno de España, en la segunda jornada de su gira latinoamericana, la primera a esa región desde que llegó al poder hace dos meses, que empezará el lunes en Chile y que le llevará también a Colombia y Costa Rica.

En Bolivia, según fuentes gubernamentales, pretende lanzar un mensaje de pleno apoyo a la cooperación española en América Latina y, en ese contexto, firmará un acuerdo que impulse esa ayuda en los próximos cuatro años.

Pero junto a ese acuerdo se firmarán otros dos, uno de ellos de cooperación judicial y otro que será el que permita la participación de las empresas españolas que lo deseen en las obras de desarrollo del ferrocarril bioceánico.

Alemania y Francia han sido dos de los países que han firmado ya acuerdos similares para que sus empresas puedan estar presentes también en la construcción de esta gran infraestructura de especial interés para Bolivia por lo que supone de vertebración del país.

El Gobierno de Sánchez asegura que hay empresas españolas interesadas en el proyecto. Casi medio centenar de ellas participaron en febrero pasado en una jornada informativa organizada de forma simultánea en La Paz y en Madrid y mediante videoconferencia por el Instituto de Comercio Exterior de España (ICEX) y la Oficina Comercial en Bolivia, en la que recibieron información detallada del proyecto.

La línea ferroviaria que se pretende construir, de 3.755 kilómetros de longitud, costaría unos 14.000 millones de dólares para obras que, en el caso de Bolivia, ya comenzaron en unos 150 kilómetros con una inversión cercana a los 221 millones, según datos del Gobierno boliviano.

Aunque el corredor bioceánico está proyectado para unir el puerto peruano de Ilo con el brasileño de Santos atravesando Bolivia, también se beneficiarían Paraguay, Uruguay y Argentina mediante la construcción de un ramal del ferrocarril desde territorio boliviano hacia una zona portuaria en suelo paraguayo vinculada a la hidrovía de los ríos Paraguay-Paraná.

Fuente: eldeber.com.bo