Frente de unidad nacional y candidaturas

Ovidio Roca

Con la misma receta y práctica culinaria de Cuba, Venezuela, Nicaragua, avanza rampante el masismo cocalero hacia la dictadura y miseria del país. Aunque utilizan una receta por demás conocida por sus nefastos resultados, ellos muy hábiles, falsos y arteros, la venden como buena a la población.

Este modelo y receta populista, estatista, de corrupción, ineficacia, destrucción de la institucionalidad, nos dejará una herencia difícil de revertir. Ellos recibieron la mesa servida y provisiones para más de diez años y la malgastaron, la dilapidaron, se la robaron, se endeudaron y ahora no hay reservas, pero la gente quiere seguir recibiendo bonos.



En el país se vive un ambiente de anomia, de confrontación y la violencia se incrementa y lo peor es que la población decepcionada ya no cree ni confía en nada ni en nadie y por esta su experiencia no acepta ninguna argumentación jurídica o técnica ante cualquier situación y busca conseguirlo todo solo por vía de la presión y el bloqueo; como les enseño el dirigente cocalero.

El masimo cocalero está dejando al país en puertas de una crisis institucional y económica, con una institucionalidad destruida, una corrupción galopante y un alto endeudamiento por tanto después del populismo y con la gente desmotivada y carente de valores  y confianza, el trabajo de reconstrucción será difícil, pero se hace imprescindible hacerlo para evitar caer en la mayor miseria y violencia que genera la informalidad y el narcotráfico.

Aunque a la gente no le gusta, es necesario hablar claro y con la verdad, la transición hacia un gobierno democrático y el camino a la libre economía y formalidad, será difícil por tanto para enfrentar al populismo cocalero del MAS hace falta un Candidato de Unidad y que sepa llegar con un mensaje de progreso y futuro a todos. La obligación por tanto es la Unidad, formar un equipo con los mejores hombres y mujeres del país, los más honestos y los más idóneos para cada tarea y para ello se hace necesario superando los egos de los diversos dirigentes y líderes nacionales y locales, unirse por el bien común.El Presidente de un país es un servidor público, un Gerente que señala el rumbo y administra las diferentes instituciones públicas de un Estado que da seguridad jurídica y estímulos para que el sector privado trabaje de forma eficiente y competitiva; pero éste funcionario no funciona, si no cuenta con un equipo de estrategas y operadores políticos, de administradores y de gerentes creíbles, honestos e idóneos. Tenemos que entender que el Presidente no es un iluminado todopoderoso, es solo el jefe de un equipo de trabajo cuya gestión debe estar limitada en el tiempo, por máximo dos periodos, pues está sujeto a padecer de hubris, la locura del poder que se produce por la tensión y el duro trabajo y que induce al  funcionario a rodearse de un grupo amigable que le da apoyo y tranquilidad emocional; el problema es que en este equipo se infiltra gente vil y rastrera, los conocidos llunkus, que para conseguir sus fines personales, lo alaban, lo adulan, lo manipulan, le mienten y mal informan, por lo que con el ego inflamado el Presidente se cree un dios omnipotente y ahí lo melean. En la antigua Roma cuando entraban los Generales triunfantes en sus cuadrigas a recibir las ovaciones del pueblo; enviado por el Senado tenía a su lado un esclavo que repetía constantemente: “Recuerda que solo eres un hombre”.

El país tiene trabajar con la gente que tiene y tenemos un estadista como Samuel, un comunicador internacional como Tuto, un hombre inteligente y que conoce el pueblo andino como Víctor Hugo, una mentalidad joven oriental como Oscar Ortiz y Eliane Capobianco  y muchos más. Los jóvenes, aquellos que no tienen compromiso con el pasado, son claves para construir el futuro apostando a la cultura de la innovación, la ciencia, la tecnología y la educación. Así podremos avanzar hacia el desarrollo sostenible, frenar el deterioro ambiental y el cambio climático.En un proceso como este se requiere apostar a ganador y unir esfuerzos; Carlos Mesa es una persona inteligente y un gran comunicador; el mensaje mediante el cual anuncio su candidatura fue brillante pero lo principal es que cuenta con una importante aceptación de la población. Es un ciudadano como todos, con muchos problemas y errores, que los oficialistas y los envidiosos le buscarán y seguro encontrarán; pero “aquel que no tenga pecados que tire la primera piedra”, como decía Juan. En consecuencia se lo debería apoyar en base a un programa y un equipo de trabajo idóneo.Para armar el equipo tenemos que pedir a los políticos y dirigentes que controlen su ego y acepten postergar su postulación en pro de una opción más ganadora, según la opinión de la gente, lo que no quiere decir que ellos no sean buenos por lo que pronto tendrán su oportunidad. Ahora es necesario más grandeza y apostar y apoyar una sola opción pues la situación es difícil, pues se trata de una operación dolorosa para salvar al país y el enfermo esta drogado y tiene miedo, prefiere seguir deteriorándose hasta morir y no enfrentar una dolorosa terapia de shock.Hoy 10 de Octubre día de movilizaciones, unos celebrando la recuperación de la democracia y otros la repostulacion de la dictadura.Fuente: ovidioroca.wordpress.com