En el mercado paralelo al de la Asociación Departamental de Productores de Coca (Adepcoca), los cocaleros venden el taque entre 2.100 y 2.800 bolivianos, con el único control de la Dirección General de Comercialización e Industrialización de la Hoja de Coca (Digcoin).Página Siete visitó ayer el mercado de coca, ubicado en Chuquiaguillo, entre las 9:30 y 12:00. Comprobó que los productores   venden sus taques en tres espacios  de unos 180 metros cuadrados  cada uno. Por el poco espacio, la venta se extendió al patio y a la avenida Las Américas.

Una media hora antes, el ministro de Desarrollo Rural y Tierras, César Cocarico, negó que en esa zona exista un mercado paralelo de coca. El miércoles aseguró que se abrió un espacio para la venta.

“Lo que se habilitaron son depósitos para aquellos compañeros productores, que son excluidos abusivamente del mercado de Adepcoca, (para que)  puedan contar con un lugar para guardar su coca”, aseveró ayer tras un acto.Sin embargo, la comercialización de la hoja se realiza todo el día. Marcelo  coloca hacia atrás su gorra cuando una señora le  pregunta el precio del taque de coca, que equivale a 50 libras. “Casera coca de Arapata, a 2.100 bolivianos te voy a dar”. Su puesto está afuera del mercado.Unos pasos más allá la mujer pregunta y otra vendedora le ofrece coca de La Asunta.  “El taque te voy   a dar a  2.300 bolivianos, hojas grandes son”. En el mercado autorizado de Adepcoca el taque cuesta entre 2.300 y 2.400 bolivianos.Varios bultos de coca están apilados en el patio del mercado ilegal y las personas que llegan pagan por los taques adquiridos. Adentro está uno de los ambientes donde Nora llama a una compradora. “Mi coca es de la Calzada, hojas grandes son, 2.400 (bolivianos) te voy a dar el taque, comprame casera”.De las gradas baja un hombre con un taque en la espalda. “¡Permiso! voy a bajar más (bultos), hay comprador”, grita.En otro de los ambientes, un funcionario vestido de negro usa un   chaleco con el logo de Digcoin, saca una estampa  de su bolsillo  y sella la hoja de ruta que  autoriza al cocalero pasar las diferentes trancas y llevar su coca al interior del país.

Julio es  de Coripata y llegó por segunda vez al mercado de Chuquiaguillo, señaló  que él y sus compañeros  no pagan por el espacio utilizado como se lo hace en Adepcoca. La única erogación que hacen es al encargado de controlar el   peso.  “Al balancero  le pagamos un boliviano. Yo traje 14 taques entonces le pago 14 bolivianos, y todos los que estamos aquí hacemos eso. Debemos ser como unos 1.500 productores”, dijo.

En el tercer espacio del mercado está una exdirigenta de Adepcoca. Ella cuenta que llegó a vender coca a ese mercado porque no le cobran por el espacio utilizado. “Aquí no pago nada, mientras que en el mercado de abajo (Adepcoca) pagaba 20 bolivianos el ingreso a los galpones”.En el mercado legal, el uso del espacio cuesta 20 bolivianos y se multa a los productores que incumplan los horarios establecidos y otras normas.La mujer contó que su coca es del municipio de Coripata, sección San Juan. “Mi coquita, hojas grandes son, especial es, 2.800 está el taque. Hay otro de hojas pequeñas a 2.300”.

Cuando los comercializadores quieren sacar la coca comprada, Digcoin les autoriza la hoja de ruta.  “Ellos te dan el sello para que salgas,  sino  no sales”, cuenta una productora.

En todo el recorrido que hizo Página Siete pudo verificar que solo  funcionarios de Digcoin  realizan el control y no así efectivos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn), como sucede en el mercado de Adepcoca.El mercado ilegal funciona en el mismo predio que la Subalcaldía de Chuquiaguillo.PÁGINA SIETE / Pamela Pomacahua  / La Paz