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Una mujer fue detenida el pasado miércoles en la localidad zaragozana de Cuarte de Huerva por efectivos de la Guardia Civil por presuntamente agredir a su compañero sentimental.
Los agentes tuvieron que reducirla, siendo escupidos en varias ocasiones al grito de «tengo coronavirus«. Hizo lo mismo cuando la mujer era trasladada en el vehículo policial a los calabozos del cuartel del barrio zaragozano de Casetas, donde repitió su actitud y escupió a otros agentes.
Los hechos ocurrieron en un domicilio de la calle Pirineos, en la citada localidad zaragozana, cuando un hombre llamó a la sala del 062 diciendo que estaba siendo agredido por su novia.
Varias dotaciones de la Guardia Civil se trasladaron al lugar y se encontraron en el interior del piso a un hombre con magulladuras y a su pareja sentimental excitada.
El abogado designado por el turno de oficio, Luis Ángel Marcén, logró que la pusieran en libertad sin ni siquiera pasar por el Juzgado de Guardia, y ella se fue a su casa, donde vive con sus dos hijas. El incidente no pasó a más.
Sin embargo, este jueves se recibió una llamada del hospital en el cuartel indicando que P. A. U., la mujer que tenían en el calabozo, había dado positivo en la prueba del coronavirus.
Alertaron igualmente al abogado que la había defendido, aunque a este no le quieren hacer la prueba, según ha indicado a varios medios locales.
En estos momentos, al menos ocho guardias civiles permanecen en sus casas en cuarentena
Al parecer, no era la primera vez que los agentes habían ido a la casa donde ocurrieron los hechos, pues en otras ocasiones la denuncia había partido de ella contra su compañero sentimental.
Fuente: https://www.elmundo.es