El procurador del Estado, José María Cabrera, reveló la noche de este viernes que la oficina del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Bolivia negó proporcionar información en torno a su no objeción a la compra de respiradores con supuesto sobreprecio, alegando inmunidad diplomática.

“No se puede incurrir en actuación de tan alta sospecha y lo mínimo que puede hacer el BID, lo permiten los convenios que tiene suscrito con Bolivia y con los demás países del hemisferio, es levantar y renunciar a cualquier privilegio e inmunidad”, afirmó. Consideró que el organismo “esconde información” a la Procuraduría.

Dos consultoras del organismo están entre los cinco aprehendidos por la compra de respiradores españoles con supuesto sobreprecio. Ese equipo se adquirió con un crédito del banco, por lo que era necesario su no objeción para el desembolso. Cabrera dijo que la documentación muestra que esa “no objeción” se dio el mismo día que fue solicitada.

“El mismo 9 de mayo el director de la Agencia de Infraestructura en Salud y Equipamiento Médico (AISEM) (Geovani Pacheco) presenta la solicitud de desembolso de ese pago parcial del BID para que emita su no objeción, el mismo 9 de mayo emite el funcionario su no objeción, indicando que se ha estudiado y se ha revisado la carpeta”, recordó.

Cabrera consideró que no corresponde que el organismo se acoja a la inmunidad para no cooperar al Estado boliviano porque no se trata de un proceso penal sino de una investigación de la Procuraduría a la que, aseguró, por Constitución Política del Estado deben cooperar todos los requeridos.

“Es inadmisible que no coopere con el Estado boliviano, siendo que él mismo -a través de su oficina de Integridad está llevando a cabo su propia investigación”, cuestionó e insistió en que la “Procuraduría está solicitando esa documentación y antecedentes (de la no objeción), y el BID hoy ha denegado esa información al Estado boliviana”.

“Es una señal funesta”, insistió ante la negativa del organismo que concedió un crédito de más de $us 80 millones para apoyar en las acciones contra el coronavirus.

De acuerdo a las denuncias hay un sobreprecio de un poco más de $us 3 millones en la compra de los respiradores españoles. En las últimas horas apareció Humberto Humérez, calificado como testigo clave, y señaló que se incrementó el precio del equipo en el eslabón de los intermediarios, del cual fue parte.

Fuente: La Razón